Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Jeremías 20:2 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

2 mandó que golpearan al profeta Jeremías y que lo colocaran en el cepo ubicado en la puerta superior de Benjamín, junto al Templo del Señor.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

2 Y azotó Pasur al profeta Jeremías, y lo puso en el cepo que estaba en la puerta superior de Benjamín, la cual conducía a la casa de Jehová.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Así que arrestó al profeta Jeremías, ordenó que lo azotaran y que lo pusieran en el cepo junto a la puerta de Benjamín, en el templo del Señor.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 al oír a Jeremías, mandó apalearlo, y lo hizo sujetar con cadenas en el calabozo de la puerta alta de Benjamín, que está en la Casa de Yavé.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Y Pasur hizo azotar al profeta Jeremías y lo puso en el cepo que estaba en la puerta alta de Benjamín,° la cual conducía a la Casa de YHVH.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Y Pasjur mandó azotar al profeta Jeremías y lo puso en el cepo que había en la puerta superior de Benjamín, en el templo de Yahveh.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Pasur azotó entonces al profeta Jeremías, y lo puso en el cepo que estaba a la puerta superior de Benjamín, la cual conducía a la casa de Jehová.

Ver Capítulo Copiar




Jeremías 20:2
30 Referencias Cruzadas  

Al oír la sentencia que el hombre de Dios pronunciaba contra el altar de Betel, el rey extendió el brazo desde el altar y dijo: «¡Agárrenlo!». Pero el brazo que había extendido contra el hombre se le paralizó, de modo que no podía contraerlo.


Díganles que ordeno que lo echen en la cárcel y solo le den pan y agua, hasta que yo regrese sin contratiempos.


Asá se enfureció contra el vidente por lo que este le dijo y lo mandó encarcelar. Al mismo tiempo, Asá oprimió también a una parte del pueblo.


Al oír esto, Sedequías, hijo de Quenaná, se levantó y le dio una bofetada a Micaías. —¿Por dónde se fue el espíritu del Señor cuando salió de mí para hablarte? —preguntó.


Pero ellos conspiraron contra Zacarías, hijo de Joyadá; entonces, por orden del rey, lo mataron a pedradas en el atrio del Templo del Señor.


Me has puesto cadenas en los pies; vigilas todos mis pasos; examinas las huellas que dejo al caminar.


Me ha sujetado los pies con cadenas y vigila todos mis pasos”.


Pelearán contra ti, pero no podrán vencerte porque yo estoy contigo para librarte», afirma el Señor.


Cuando los oficiales de Judá escucharon estas cosas, fueron del palacio del rey al Templo del Señor y se apostaron a la entrada de la Puerta Nueva del Templo.


Pero en cuanto Jeremías terminó de decirle al pueblo todo lo que el Señor había ordenado, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo lo apresaron y dijeron: «¡Vas a morir!


‘El Señor te ha puesto como sacerdote en lugar del sacerdote Joyadá, para que vigiles en el Templo del Señor. A todo loco que se haga pasar por profeta, lo pondrás en el cepo y en el calabozo.


Por el contrario, mandó a Jeramel, su hijo, a Seraías, hijo de Azriel, y a Selemías, hijo de Abdel, para que arrestaran al escriba Baruc y al profeta Jeremías. Pero el Señor los había escondido.


Pero al llegar a la puerta de Benjamín, un capitán de la guardia llamado Irías, hijo de Selemías y nieto de Jananías, detuvo al profeta Jeremías y lo acusó: —¡Estás por pasarte a los babilonios!


Entonces el rey Sedequías ordenó que pusieran a Jeremías en el patio de la guardia y que, mientras hubiera pan en la ciudad, todos los días le dieran una porción del pan horneado en la calle de los Panaderos. Así fue como Jeremías permaneció en el patio de la guardia.


»Desde Gueba hasta Rimón, al sur de Jerusalén, todo el país se volverá un desierto. Pero Jerusalén se levantará y permanecerá en su lugar, desde la puerta de Benjamín hasta el sitio de la puerta Primera, hasta la puerta del Ángulo, y desde la torre de Jananel hasta los lagares del rey.


Los labradores agarraron a esos siervos; golpearon a uno, mataron a otro y apedrearon a un tercero.


Arrestaron a Pedro y a Juan y, como ya anochecía, los metieron en la cárcel hasta el día siguiente.


Entonces arrestaron a los apóstoles y los metieron en la cárcel común.


Entonces llamaron a los apóstoles y, luego de azotarlos, les ordenaron que no hablaran más en el nombre de Jesús. Después de eso los soltaron.


¿A cuál de los profetas no persiguieron sus antepasados? Ellos mataron a los que de antemano anunciaron la venida del Justo, y ahora a este lo han traicionado y asesinado


Vi que la mujer se había emborrachado con la sangre de los creyentes y de los que testificaron de Jesús. Al verla, quedé sumamente asombrado.


No tengas miedo de lo que estás por sufrir. Te advierto que el diablo meterá a algunos de ustedes en la cárcel para ponerlos a prueba y sufrirán aflicciones durante diez días. Sé fiel hasta la muerte y yo te daré la corona de la vida.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos