Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





2 Reyes 4:2 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

2 —¿Y qué puedo hacer por ti? —preguntó Eliseo—. Dime, ¿qué tienes en casa? —Su servidora no tiene nada en casa —respondió—, excepto un poco de aceite.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

2 Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 —¿Cómo puedo ayudarte? —preguntó Eliseo—. Dime, ¿qué tienes en tu casa? —No tengo nada, solo un frasco de aceite de oliva —contestó ella.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Eliseo le dijo: '¿Qué puedo hacer por ti? Dime ¿qué tienes en tu casa?' Respondió: 'Tu sirvienta no tiene nada en tu casa, excepto un cantarito de aceite'.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Y Eliseo le dijo: ¿Qué haré por ti? Dime qué tienes en casa. Y ella respondió: Tu sierva no tiene en su casa sino una vasija de aceite.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Eliseo le dijo: '¿Qué puedo hacer por ti? Dime: ¿qué tienes en casa?'. Respondió ella: 'Tu sierva no tiene en casa otra cosa sino una alcuza de aceite'.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Y Eliseo le dijo: ¿Qué puedo hacer por ti? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.

Ver Capítulo Copiar




2 Reyes 4:2
10 Referencias Cruzadas  

—Tan cierto como el Señor tu Dios vive —respondió ella—, no me queda ni un pedazo de pan; solo tengo un puñado de harina en la tinaja y un poco de aceite en el jarro. Precisamente estaba recogiendo unos leños para llevármelos a casa y hacer una comida para mi hijo y para mí. ¡Será nuestra última comida antes de morirnos de hambre!


Al cruzar, Elías preguntó a Eliseo: —¿Qué quieres que haga por ti antes de que me separen de tu lado? —Te pido que yo herede una doble porción de tu espíritu —respondió Eliseo.


Eliseo ordenó: —Sal y pide a tus vecinos que te presten sus vasijas; que no sean pocas.


—¿Qué tienes en la mano? —preguntó el Señor. —Una vara —respondió Moisés.


—¿Cuántos panes tienen? —preguntó Jesús. —Siete y unos pocos pescaditos —respondieron ellos.


—No tengo plata ni oro —declaró Pedro—, pero lo que tengo te doy. En el nombre de Jesucristo de Nazaret, ¡levántate y anda!


aparentemente tristes, pero siempre alegres; pobres en apariencia, pero enriqueciendo a muchos; como si no tuviéramos nada, pero poseyéndolo todo.


Escuchen, mis queridos hermanos: ¿No ha escogido Dios a los que son pobres, según el mundo, para que sean ricos en la fe y hereden el reino que prometió a quienes lo aman?


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos