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1 Samuel 26:25 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

25 —¡Bendito seas, David, hijo mío! —respondió Saúl—. Tú harás grandes cosas y en todo triunfarás. Luego David siguió su camino y Saúl regresó a su palacio.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

25 Y Saúl dijo a David: Bendito eres tú, hijo mío David; sin duda emprenderás tú cosas grandes, y prevalecerás. Entonces David se fue por su camino, y Saúl se volvió a su lugar.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Y Saúl le dijo a David: —Bendiciones sobre tu vida, David, hijo mío. Harás muchas acciones heroicas y seguramente te irá bien en todo lo que hagas. Luego David se fue, y Saúl regresó a su casa.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Saúl dijo a David: 'Bendito seas, hijo mío. Ciertamente te irá bien en todo lo que hagas'. Después de eso, David siguió su camino y Saúl se regresó a su casa.

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La Biblia Textual 3a Edicion

25 Entonces Saúl dijo a David: ¡Bendito seas tú, hijo mío David! Ciertamente serás poderoso y prevalecerás. Y David siguió por su camino y Saúl se volvió a su lugar.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 Dijo entonces Saúl a David: '¡Bendito tú, hijo mío, David! En todo cuanto hagas ciertamente triunfarás'. Tomó luego David su camino, y Saúl se volvió a su lugar.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

25 Y Saúl dijo a David: Bendito eres tú, hijo mío David; sin duda ejecutarás tú grandes empresas, y prevalecerás. Entonces David se fue su camino, y Saúl se volvió a su lugar.

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1 Samuel 26:25
10 Referencias Cruzadas  

Entonces le dijo: —Ya no te llamarás Jacob, sino Israel, porque has luchado con Dios y con los hombres y has vencido.


No le creas, aunque te hable con dulzura, porque su corazón está lleno de siete abominaciones.


No prevalecerá ninguna arma que se forje contra ti; toda lengua que te acuse tú la refutarás. Esta es la herencia de los siervos del Señor, la justicia que de mí procede», afirma el Señor.


Luchó con el ángel, y lo venció; lloró y le rogó que lo favoreciera. Se lo encontró en Betel y allí habló con él;


¿Quién nos apartará del amor de Cristo? ¿La tribulación o la angustia, la persecución, el hambre, la desnudez, el peligro o la espada?


Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.


¿Quién encuentra a su enemigo y le perdona la vida? ¡Que el Señor te recompense por lo bien que me has tratado hoy!


Ahora caigo en cuenta de que tú serás el rey y de que consolidarás el reino de Israel.


David se lo juró. Luego Saúl volvió a su palacio, mientras David y sus hombres subieron al refugio.


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