Jeremías 3:22 - Biblia Martin Nieto

²² Volved, hijos rebeldes, yo curaré vuestras rebeldías. 'Aquí estamos, a ti venimos, porque tú eres el Señor, nuestro Dios.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²² Convertíos, hijos rebeldes, y sanaré vuestras rebeliones. He aquí nosotros venimos a ti, porque tú eres Jehová nuestro Dios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²² «Vuelvan a mí, hijos descarriados —dice el Señor—, y les sanaré el corazón extraviado». «Sí, ya vamos —responde el pueblo—, porque tú eres el Señor nuestro Dios.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²² ¡Vuelvan, hijos rebeldes, que los voy a sanar de su rebelión! 'Aquí estamos de vuelta junto a ti, porque tú eres Yavé, nuestro Dios.

La Biblia Textual 3a Edicion

²² ¡Volveos, oh hijos apóstatas, Y sanaré vuestras apostasías! ¡Henos aquí! Hemos venido a ti, Porque Tú, oh YHVH, eres nuestro Dios.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²² Convertíos, hijos rebeldes, curaré vuestras rebeldías. Aquí estamos: venimos a ti; pues tú, Yahveh, eres nuestro Dios.

Jeremías 3:22 Referencias Cruzadas

Cantares 1:4

Arrástrame tras de ti: ¡corramos! El rey me ha llevado a sus estancias. Seamos felices y gocemos contigo. Celebremos tus amores más que el vino. ¡Con cuánta razón se enamoran de ti!

Isaías 1:2

Escuchad, cielos; presta, tierra, oído, porque habla el Señor: He alimentado, he hecho crecer hijos, y ellos se han sublevado contra mí.

Isaías 27:8

Lo ha castigado con la dispersión, con el destierro; lo ha aventado con la fuerza de su soplo, como en día de viento solano.

Isaías 31:6

Volved a aquel de quien tanto os habéis apartado, hijos de Israel.

Isaías 57:17

Por su grave perversidad me he irritado; lo herí y me oculté en mi enojo. Él se iba rebelde, por el camino de su corazón.

Jeremías 3:12

Vete, pues, a pronunciar estas palabras hacia el lado del norte. Dirás: Vuelve, rebelde Israel, dice el Señor. No apartaré mi rostro de vosotros, porque soy misericordioso, dice el Señor; no estaré airado eternamente.

Jeremías 30:17

Sí, yo te devolveré la salud, yo curaré tus heridas -dice el Señor-, porque te han llamado la Abandonada, Sión, de quien nadie se cuida.

Jeremías 31:18

Escucho, escucho el lamento de Efraín: 'Me has castigado, y he sufrido el castigo como novillo indómito; haz que vuelva y volveré, pues tú eres el Señor, mi Dios.

Jeremías 33:6

Yo les devolveré la salud, los curaré y sanaré y les haré ver abundancia de paz y seguridad.

Jeremías 4:1

Si tú quieres volver, oh Israel -dice el Señor- , a mí es a quien has de volver; si quitas de mi vista tus inmundicias, no andarás errante de acá para allá lejos de mí.

Ezequiel 18:30

Yo juzgaré, pues, a cada cual según su conducta, casa de Israel, dice el Señor Dios. Convertíos y abandonad todas vuestras injusticias, y la injusticia no será más vuestra ruina.

Ezequiel 33:11

Diles: Por mi vida, dice el Señor Dios, que no me complazco en la muerte del malvado, sino en que se convierta de su conducta y viva. Convertíos, convertíos de vuestros perversos caminos. ¿Por qué queréis morir, oh casa de Israel?

Oseas 13:4

Sin embargo, yo, el Señor, soy tu Dios desde el país de Egipto; no conoces otro Dios más que yo, no hay salvador fuera de mí.

Oseas 14:1

Samaría será castigada porque se ha rebelado contra su Dios. Caerán a espada, sus niños serán estrellados y reventadas sus mujeres encinta.

Oseas 14:4

Asiria no nos puede salvar; no montaremos ya en los caballos, y no diremos más 'dios nuestro' a la obra de nuestras manos, pues en ti encuentra compasión el huérfano.

Oseas 14:5

Yo los curaré de su apostasía, los amaré de todo corazón, pues mi ira se ha apartado ya de ellos.

Oseas 14:8

Volverán a sentarse en mi sombra; cultivarán el trigo, florecerán como la viña y su renombre será como el del vino del Líbano.

Oseas 3:5

Después los israelitas volverán a buscar al Señor, su Dios, y a David, su rey, y acudirán con temor al Señor y a sus bienes en el tiempo futuro.

Joel 2:12

Y ahora -dice el Señor- volved a mí de todo corazón con ayunos, llantos y lamentos;

Zacarías 13:9

Y haré pasar por el fuego a esta tercera parte: la purificaré como se purifica la plata, y la probaré como se prueba el oro. Él invocará mi nombre, y yo le escucharé; yo diré: 'Éste es mi pueblo', y él dirá: 'El Señor es mi Dios'.