Proverbios 15:32 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

³² Quien no acepta la corrección se hace daño a sí mismo; quien la acepta, gana en entendimiento.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³² El que tiene en poco la disciplina menosprecia su alma; Mas el que escucha la corrección tiene entendimiento.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³² Si rechazas la disciplina, solo te harás daño a ti mismo, pero si escuchas la corrección, crecerás en entendimiento.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³² El que desprecia la corrección se perjudica a sí mismo, el que escucha los consejos forma su conciencia.

La Biblia Textual 3a Edicion

³² Quien rechaza la corrección menosprecia su alma, Quien escucha la amonestación adquiere cordura.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³² Quien rechaza la instrucción desprecia su vida, quien escucha la reprensión se hace sensato.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³² El que tiene en poco la instrucción, desprecia su alma; mas el que escucha la reprensión, adquiere entendimiento.

Proverbios 15:32 Referencias Cruzadas

Salmos 50:17

pues no quieres que te corrija ni tomas en cuenta mis palabras.

Proverbios 1:7

Todo el que quiera ser sabio debe empezar por obedecer a Dios. Pero la gente ignorante no quiere ser corregida ni llegar a ser sabia.

Proverbios 10:17

El que acepta la corrección tendrá una larga vida, pero quien no oye consejos no llegará muy lejos.

Proverbios 13:18

Si no aprecias la disciplina, te esperan la pobreza y la deshonra; si aceptas que se te corrija, recibirás grandes honores.

Proverbios 15:14

Los que aman el conocimiento siempre buscan aprender más; pero los ignorantes hablan y solo dicen tonterías.

Proverbios 15:21

El tonto encuentra muy graciosa su falta de inteligencia; el que es inteligente corrige su conducta.

Proverbios 15:31

Si quieres ser sabio, acepta las correcciones que buscan mejorar tu vida.

Proverbios 15:33

Quien obedece a Dios gana en sabiduría y disciplina; quien quiera recibir honores debe empezar por ser humilde.

Proverbios 15:5

El que es tonto no acepta que su padre lo corrija, pero el que es sabio acepta la corrección.

Proverbios 17:16

De qué le sirve al tonto el dinero, si no tiene entendimiento; ¡la sabiduría no se compra!

Proverbios 18:15

El que es sabio e inteligente presta atención y aprende más.

Proverbios 19:20

El que oye consejo y acepta que lo corrijan acabará siendo sabio.

Proverbios 29:1

Quien no acepta las reprensiones será destruido, y nadie podrá evitarlo.

Eclesiastés 7:5

Más vale una reprensión de sabios que una alabanza de tontos.

Isaías 1:5

»Han sido tan rebeldes, y los he castigado tanto, que ya no les queda un lugar sano. De pies a cabeza están cubiertos de heridas. Nadie se las ha curado ni vendado, ni les ha calmado los dolores con aceite. ¡Se han quedado sin fuerzas!

Isaías 3:9

»Todos ellos son culpables; ¡en la cara se les ve! Nadie esconde sus pecados; ni siquiera los disimulan. Se están portando igual que los habitantes de Sodoma. Nada bueno les espera; se están ganando su propio castigo.

Jeremías 5:3

Yo contesté: «Dios de Israel, yo sé que tú buscas gente honesta. Pero este pueblo es muy terco y más duro que una roca; no ha querido arrepentirse. Por eso lo has castigado, pero parece que no le dolió; y aunque lo has aplastado, no ha querido hacerte caso.

Deuteronomio 21:18

»Si alguno de ustedes tiene un hijo terco y rebelde, que no obedece a su padre ni a su madre aunque lo castiguen, hay que hacer lo siguiente:

Deuteronomio 21:20

Entonces les dirán a los líderes: “Nuestro hijo es muy terco y rebelde. No nos obedece. Para colmo, ¡es un glotón y un borracho!”

Hebreos 12:15

No dejen que nadie se aleje del amor de Dios. Tampoco permitan que nadie cause problemas en el grupo, porque eso les haría daño; ¡sería como una planta amarga, que los envenenaría!

Santiago 1:22

¡Obedezcan el mensaje de Dios! Si lo escuchan, pero no lo obedecen, se engañan a ustedes mismos y les pasará lo mismo que a quien se mira en un espejo: tan pronto como se va, se olvida de cómo era.

Apocalipsis 3:19

’Yo reprendo y corrijo a los que amo. Por eso, vuélvete a Dios y obedécelo completamente.