Los enemigos de esos pueblos parecen saltamontes que se lanzan sobre ellos y les quitan sus riquezas.
Sus despojos serán recogidos como cuando recogen orugas; correrán sobre ellos como de una a otra parte corren las langostas.
Así como la oruga y la langosta despojan los campos y las vides, de la misma forma será despojado el ejército caído de Asiria.
¡recojan su botín como lo hace la langosta, tírense encima como nube de langostas!
Y se recogía el botín como se recoge el saltamonte, Se abalanzan a él como avalancha de langostas.
Se amontona el botín como montón de saltamontes; como se lanzan las langostas, se lanzan sobre él.