Proverbios 26:5 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁵ Responde al necio según su necedad, no sea que se tenga por sabio.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁵ Responde al necio como merece su necedad, Para que no se estime sabio en su propia opinión.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁵ Responde a los argumentos absurdos de los necios o se creerán sabios en su propia opinión.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁵ Responde a las estupideces de un imbécil, porque si no se va a creer un sabio.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁵ Responde al necio como merece su necedad, No sea que se tenga por sabio.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁵ Responde al necio según su necedad, para que no se estime sabio en su propia opinión.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

⁵ Pon al tonto en su lugar, para que no se crea muy sabio.

Proverbios 26:5 Referencias Cruzadas

Proverbios 26:12

¿Has visto un hombre que se tiene por sabio? Más cabe esperar de un necio que de él.

Proverbios 26:4

No respondas al necio según su necedad, no sea que tú mismo te iguales a él.

Proverbios 26:6

Se corta los pies y bebe amargura quien confía mensajes a un necio.

Proverbios 28:11

El rico se hace la ilusión de que es sabio, pero el hombre inteligente lo desenmascara.

Proverbios 3:7

No seas sabio a tus ojos, teme a Yahveh y apártate del mal:

Isaías 5:21

¡Ay de quienes se tienen por sabios y de quienes se creen sagaces!

Juan 8:7

Como ellos insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo: 'El que entre vosotros esté sin pecado, sea el primero en tirar una piedra contra ella'.

Romanos 11:25

No quiero, hermanos, para que no presumáis de vosotros mismos, que ignoréis este misterio: que el endurecimiento parcial de Israel se prolongará hasta que entre la totalidad de los gentiles.

Romanos 12:16

Tened unos con otros el mismo sentir, sin abrigar sentimientos de grandeza, sino dejándoos llevar al trato con los humildes. No os tengáis por sabios ante vosotros mismos.

Tito 1:13

¡Y a fe que es un testimonio verdadero! Razón de más para que los reprendas sin contemplaciones, a ver si recobran la salud de la fe