Proverbios 22:17 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁷ Palabras de los sabios. Presta atención y escucha mis palabras, aplica tu corazón a mi doctrina:

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹⁷ Inclina tu oído y oye las palabras de los sabios, Y aplica tu corazón a mi sabiduría;

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁷ Escucha las palabras de los sabios; aplica tu corazón a mi enseñanza.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁷ Abre tus oídos, escucha mis palabras, pon atención a mis enseñanzas.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁷ Inclina tu oído y escucha las palabras de los sabios, Y aplica tu corazón a mis enseñanzas,

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁷ Inclina tu oído, y oye las palabras de los sabios, y aplica tu corazón a mi conocimiento;

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹⁷ Presta atención a mis palabras, que son consejos sabios, y ponte a pensar en mis enseñanzas.

Proverbios 22:17 Referencias Cruzadas

Salmos 78:1

Maskil. De Asaf. Escucha, pueblo mío, mi instrucción, apresta a mis palabras tus oídos:

Salmos 90:12

Enséñanos exacta la medida de los días para que en nosotros penetre la sabiduría.

Proverbios 1:3

para recibir instrucción provechosa, justicia, equidad y rectitud,

Proverbios 23:12

Aplica tu corazón a la instrucción y tus oídos a la voz de la experiencia.

Proverbios 24:23

También esto es de los sabios: No está bien la parcialidad en el juicio.

Proverbios 3:1

Hijo mío, no olvides mis enseñanzas y guarda mis preceptos en tu corazón,

Eclesiastés 12:11

Las palabras de los sabios son como aguijadas, y como estacas plantadas las de los autores de colecciones, ofrecidas por un solo pastor.

Eclesiastés 7:25

He vuelto a reflexionar en mi corazón y a inquirir acerca de la sabiduría y la razón, a considerar que la maldad es locura, y la necedad insensatez.

Eclesiastés 8:16

Cuando me dediqué a conocer la sabiduría y a examinar las fatigas que se toma el hombre en la tierra -porque ni de día ni de noche ven sus ojos el sueño-,

Eclesiastés 8:9

Todo esto lo he visto al examinar cuanto se hace bajo el sol, en un tiempo en que el hombre domina sobre el hombre para su mal.

Isaías 55:3

Inclinad vuestro oído y venid a mí, escuchadme y viviréis. Quiero sellar con vosotros una alianza eterna, las gracias permanentes de David.

Mateo 17:5

Todavía estaba él hablando cuando una nube luminosa los envolvió y de la nube salió una voz que decía: 'Éste es mi Hijo amado, en quien me he complacido; escuchadle'.