Proverbios 16:31 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³¹ Corona de gloria es la cabeza con canas, si se halla en el camino de justicia.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³¹ Corona de honra es la vejez Que se halla en el camino de justicia.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³¹ Las canas son una corona de gloria que se obtiene por llevar una vida justa.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³¹ Los cabellos blancos son una corona respetable: está al fin del camino de la justicia.

La Biblia Textual 3a Edicion

³¹ Corona de honra es la cabeza cana, Cuando está en el camino de justicia.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³¹ Cabellos blancos son corona de gloria: en la senda de la justicia se la encuentra.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

³¹ Llegar a viejo es una honra; las canas son la corona que se gana por ser honrado.

Proverbios 16:31 Referencias Cruzadas

Job 41:32

En pos de sí hace resplandecer la senda, que parece que el abismo sea cano.

Proverbios 16:30

Cierra sus ojos para pensar perversidades; mueve sus labios, efectúa el mal.

Proverbios 16:32

Mejor es el lento para la ira que el poderoso; y el que domina su espíritu, que el que toma una ciudad.

Proverbios 17:6

Corona de los viejos son los nietos; y la gloria de los hijos son sus padres.

Proverbios 20:29

La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los viejos, sus canas.

Eclesiastés 12:5

cuando también temerán a la altura, y a los terrores en el camino; y florecerá el almendro, y la langosta será una carga, y se perderá el apetito; porque el hombre va a su morada eterna, y los que endechan andarán al derredor de las calles.

Eclesiastés 4:13

Mejor es el muchacho pobre y sabio, que el rey viejo y necio, que no admite consejo.

Levítico 19:32

Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor: Yo soy Jehová.

Lucas 1:6

Y ambos eran justos delante de Dios, andando irreprensibles en todos los mandamientos y ordenanzas del Señor.

Filemón 1:9

más bien te ruego por amor, siendo como soy, Pablo ya anciano, y ahora además, prisionero de Jesucristo.