Salmos 39:6 - Biblia Reina Valera 1909

⁶ Ciertamente en tinieblas anda el hombre; Ciertamente en vano se inquieta: Junta, y no sabe quién lo allegará.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁶ Ciertamente como una sombra es el hombre; Ciertamente en vano se afana; Amontona riquezas, y no sabe quién las recogerá.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ Somos tan solo sombras que se mueven y todo nuestro ajetreo diario termina en la nada. Amontonamos riquezas sin saber quién las gastará.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ Pasa el hombre mortal como una sombra, no es más que un soplo, pero se afana y almacena sin saber quién lo tendrá.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ Solamente en una semejanza de realidad° anda el hombre en derredor, Solamente para correr tras el viento se afana,° Pues atesora, pero no sabe quién lo recogerá.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ Mira: hiciste mis días de unos palmos, mi existencia ante ti, como una nada: en total no es más que un soplo cuanto el hombre subsiste. Selah

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁶ Ciertamente en tinieblas anda el hombre; ciertamente en vano se afana; acumula riquezas, y no sabe quién las recogerá.

Salmos 39:6 Referencias Cruzadas

Job 14:1

EL HOMBRE nacido de mujer, Corto de días, y harto de sinsabores:

Job 7:16

Aburríme: no he de vivir yo para siempre; Déjame, pues que mis días son vanidad.

Job 7:7

Acuérdate que mi vida es viento, Y que mis ojos no volverán á ver el bien.

Salmos 127:2

Por demás os es el madrugar á levantaros, el veniros tarde á reposar, El comer pan de dolores: Pues que á su amado dará Dios el sueño.

Salmos 144:4

El hombre es semejante á la vanidad: Sus días son como la sombra que pasa.

Salmos 89:48

¿Qué hombre vivirá y no verá muerte? ¿Librarás su vida del poder del sepulcro? (Selah.)

Proverbios 13:22

El bueno dejará herederos á los hijos de los hijos; Y el haber del pecador, para el justo está guardado.

Proverbios 23:5

¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? Porque hacerse han alas, Como alas de águila, y volarán al cielo.

Proverbios 27:24

Porque las riquezas no son para siempre; ¿Y será la corona para perpetuas generaciones?

Eclesiastés 1:14

Yo miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu.

Eclesiastés 11:10

Quita pues el enojo de tu corazón, y aparta el mal de tu carne: porque la mocedad y la juventud son vanidad.

Eclesiastés 12:13

El fin de todo el discurso oído es este: Teme á Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.

Eclesiastés 12:8

Vanidad de vanidades, dijo el Predicador, todo vanidad.

Eclesiastés 2:26

Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría y ciencia y gozo: mas al pecador da trabajo, el que allegue y amontone, para que dé al que agrada á Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

Eclesiastés 2:8

Alleguéme también plata y oro, y tesoro preciado de reyes y de provincias; híceme de cantores y cantoras, y los deleites de los hijos de los hombres, instrumentos músicos y de todas suertes.

Eclesiastés 5:14

Las cuales se pierden en malas ocupaciones, y á los hijos que engendraron nada les queda en la mano.

Isaías 55:2

¿Por qué gastáis el dinero no en pan, y vuestro trabajo no en hartura? Oidme atentamente, y comed del bien, y deleitaráse vuestra alma con grosura.

Lucas 12:26

Pues si no podéis aun lo que es menos, ¿para qué estaréis afanosos de lo demás?

Lucas 12:29

Vosotros, pues, no procuréis qué hayáis de comer, ó qué hayáis de beber: ni estéis en ansiosa perplejidad.

1 Corintios 7:31

Y los que usan de este mundo, como los que no usan: porque la apariencia de este mundo se pasa.

Santiago 4:14

Y no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es un vapor que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.

Santiago 5:3

Vuestro oro y plata están corrompidos de orín; y su orín os será en testimonio, y comerá del todo vuestras carnes como fuego. Os habéis allegado tesoro para en los postreros días.

1 Pedro 1:24

Porque Toda carne es como la hierba, Y toda la gloria del hombre como la flor de la hierba: Secóse la hierba, y la flor se cayó;

1 Pedro 5:7

Echando toda vuestra solicitud en él, porque él tiene cuidado de vosotros.