1 Juan 1:3 - Biblia Palabra de Dios para Todos3 Lo que hemos visto y oído se lo anunciamos también a ustedes para que tengan compañerismo con nosotros, así como nosotros tenemos compañerismo con el Padre y con su Hijo, Jesucristo. Ver CapítuloMás versionesBiblia Reina Valera 19603 lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Ver CapítuloBiblia Nueva Traducción Viviente3 Les anunciamos lo que nosotros mismos hemos visto y oído, para que ustedes tengan comunión con nosotros; y nuestra comunión es con el Padre y con su Hijo, Jesucristo. Ver CapítuloBiblia Católica (Latinoamericana)3 Lo que hemos visto y oído se lo anunciamos también a ustedes para que estén en comunión con nosotros, pues nosotros estamos en comunión con el Padre y con su Hijo, Jesucristo. Ver CapítuloLa Biblia Textual 3a Edicion3 Lo que hemos visto y oído os lo anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre y con su Hijo, Jesús el Mesías. Ver CapítuloBiblia Serafín de Ausejo 19753 lo que hemos visto y oído os lo anunciamos también a vosotros, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros. Pues nosotros, en efecto, tenemos comunión con el Padre y con su Hijo Jesucristo. Ver CapítuloBiblia Reina Valera Gómez (2023)3 Lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Ver Capítulo |
Este es el plan secreto: los que no son judíos recibirán lo mismo que Dios les ha prometido a los judíos. Los judíos y los que no son judíos son miembros del mismo cuerpo y participan juntos de la promesa que Dios hizo en Jesucristo. Los que no son judíos reciben todo esto por medio de la buena noticia de salvación.
Y es correcto que piense así de todos ustedes, porque en mi corazón los tengo aquí conmigo. Han compartido conmigo el generoso amor que Dios me ha mostrado. Ustedes siempre han sido solidarios conmigo, no solo cuando estuve en prisión, sino también cada vez que tuve que defender la buena noticia de salvación y probar que es la verdad.