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1 Juan 3:8 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento)

8 Pero el que sigue pecando pertenece al diablo, porque el diablo es pecador desde el principio del mundo. El Hijo de Dios vino para aniquilar la obra del diablo,

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

8 El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Sin embargo, cuando alguien sigue pecando, demuestra que pertenece al diablo, el cual peca desde el principio; pero el Hijo de Dios vino para destruir las obras del diablo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 En cambio quienes pecan son del Diablo, pues el Diablo peca desde el principio. Para esto se ha manifestado el Hijo de Dios: para deshacer las obras del Diablo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 el que practica° el pecado procede del diablo, pues el diablo peca° desde un principio. Para esto fue manifestado el Hijo de Dios: para que destruyera las obras del diablo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 El que comete pecado del diablo es, porque el diablo peca desde el principio. Para esto se manifestó el Hijo de Dios: para destruir las obras del diablo.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

8 El que hace pecado, es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.

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1 Juan 3:8
26 Referencias Cruzadas  

Ahora bien, si yo expulso los demonios por el poder del Espíritu de Dios , es que el reino de Dios ya ha llegado a vosotros.


y el campo es el mundo. La buena semilla representa a los que pertenecen al mundo, y la cizaña representa a los que pertenecen al diablo.


Entonces se le acercó el diablo y le dijo: - Si de veras eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.


- ¡Jesús de Nazaret, déjanos en paz! ¿Has venido a destruirnos? ¡Te conozco bien: tú eres el Santo de Dios!


Jesús les contestó: - Ya he visto a Satanás que caía del cielo como un rayo.


Es ahora cuando el mundo va a ser juzgado; es ahora cuando el jefe de este mundo va a ser vencido.


y la condena está en que el que tiraniza a este mundo ya ha sido condenado.


Vuestro padre es el diablo; le pertenecéis a él, e intentáis complacerle en sus deseos. El fue un asesino desde el principio y no se mantuvo en la verdad. Por eso no tiene nada que ver con la verdad. Cuando miente, habla de lo que tiene dentro, porque es mentiroso y padre de la mentira.


Estad seguros de que el Dios de la paz pondrá muy pronto a Satanás bajo vuestros pies. Que nuestro Señor Jesucristo os acompañe con su favor.


Era el tiempo en que seguíais los torcidos caminos de este mundo y las directrices del que está al frente de las fuerzas invisibles del mal, de ese espíritu que al presente actúa con eficacia entre quienes se hayan en rebeldía contra Dios.


Ha derribado a principados y potestades y los ha convertido en público espectáculo, llevándolos cautivos en su cortejo triunfal.


Grande es, sin lugar a dudas, el misterio de nuestra religión: Cristo vino al mundo como ser mortal, el Espíritu dio testimonio de él, los ángeles le contemplaron, fue anunciado a las naciones, en el mundo le creyeron, Dios le recibió en su gloria.


Y como los miembros de una familia participan de una misma carne y sangre, también Jesús comparte carne y sangre con los hombres. Puede así, con su muerte, reducir a la impotencia al señor de la muerte, es decir, al diablo,


ya que, de haberse ofrecido a sí mismo muchas veces, otras tantas tendría que haberse padecido y muerto desde que existe el mundo. No; Cristo se ha manifestado una sola vez ahora, en el momento culminante de la historia, destruyendo el pecado con el sacrificio de sí mismo.


Pues sabido es que Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que los arrojó a las cavernas tenebrosas del abismo, donde los mantiene encarcelados para el juicio.


(Está escrito en el anterior).


¿Queréis distinguir a los hijos de Dios de los hijos del diablo? Si no practicáis el bien ni amáis al hermano, no sois hijos de Dios.


Y sabéis que Jesucristo, estando limpio de pecado, vino a borrar nuestros pecados.


Sabemos también que somos de Dios, mientras que el mundo entero está sometido al maligno.


Ya sé que lo conocéis todo perfectamente, pero vale la pena recordaros unas cuantas cosas. Por ejemplo, que aunque el Señor liberó al pueblo de la opresión egipcia, después aniquiló a los incrédulos.


Y el diablo, el seductor, fue arrojado al lago de fuego y azufre. Allí, en compañía de la bestia y el falso profeta, sufrirá tormento por siempre, día y noche sin cesar.


Allí fueron arrojados también aquellos cuyo nombre no esta inscrito en el libro de la vida.


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