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Lucas 8:21 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

21 Pero él les contestó: ―Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios y la ponen en práctica.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

21 Él entonces respondiendo, les dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios, y la hacen.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

21 Jesús respondió: —Mi madre y mis hermanos son todos los que oyen la palabra de Dios y la obedecen.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

21 Jesús respondió: 'Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen.

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La Biblia Textual 3a Edicion

21 Él respondió y les dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios y la practican.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

21 Pero él les contestó: 'Mi madre y mis hermanos son aquellos que oyen la palabra de Dios y la ponen en práctica'.

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Lucas 8:21
19 Referencias Cruzadas  

Mientras estaba aún hablando, apareció una nube luminosa que los envolvió, de la cual salió una voz que dijo: «Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él. ¡Escuchadle!»


El Rey les responderá: “Os aseguro que todo lo que hicisteis por uno de mis hermanos, aun por el más pequeño, por mí lo hicisteis”.


Él les responderá: “Os aseguro que todo lo que no hicisteis por el más pequeño de mis hermanos, tampoco lo hicisteis por mí”.


―No tengáis miedo —les dijo Jesús—. Id a decir a mis hermanos que se dirijan a Galilea, y allí me verán.


Pero la parte que cayó en buen terreno son los que oyen la palabra con corazón noble y bueno, y la retienen; y, como perseveran, producen una buena cosecha.


―Tu madre y tus hermanos están afuera y quieren verte —le avisaron.


¿Entendéis esto? Dichosos seréis si lo ponéis en práctica.


―Suéltame, porque todavía no he vuelto al Padre. Ve más bien a mis hermanos y diles: “Vuelvo a mi Padre, que es vuestro Padre; a mi Dios, que es vuestro Dios”.


Así que de ahora en adelante no consideramos a nadie según criterios meramente humanos. Aunque antes conocimos a Cristo de esta manera, ya no lo conocemos así.


«Yo seré un padre para vosotros, y vosotros seréis mis hijos y mis hijas, dice el Señor Todopoderoso».


No os contentéis solo con escuchar la palabra, pues así os engañáis vosotros mismos. Llevadla a la práctica.


Si reconocéis que Jesucristo es justo, reconoced también que todo el que practica la justicia ha nacido de él.


Querido hermano, no imites lo malo, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; el que hace lo malo no ha visto a Dios.


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