Lucas 20:13 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

¹³ »Entonces pensó el dueño del viñedo: “¿Qué voy a hacer? Enviaré a mi hijo amado; seguro que a él sí lo respetarán”.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹³ Entonces el señor de la viña dijo: ¿Qué haré? Enviaré a mi hijo amado; quizá cuando le vean a él, le tendrán respeto.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹³ »“¿Qué haré? —se preguntó el dueño—. ¡Ya sé! Enviaré a mi querido hijo. Sin duda a él lo respetarán”.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹³ El dueño de la viña se dijo entonces: ¿Qué hacer? Enviaré a mi hijo querido, pues a él lo respetarán.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹³ Dijo entonces el señor de la viña: ¿Qué haré?° Enviaré a mi hijo amado, quizás a éste respetarán.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹³ El dueño de la viña dijo entonces: '¿Qué voy a hacer? Les voy a mandar a mi hijo muy querido; seguramente que a éste lo respetarán'.

Lucas 20:13 Referencias Cruzadas

Isaías 5:4

¿Qué más se podría hacer por mi viña que yo no haya hecho? Yo esperaba que diera buenas uvas; ¿por qué dio uvas agrias?

Jeremías 36:3

Cuando los de Judá se enteren de todas las calamidades que pienso enviar contra ellos, tal vez abandonen su mal camino y pueda yo perdonarles su iniquidad y su pecado».

Jeremías 36:7

¡A lo mejor su oración llega a la presencia del Señor y cada uno se convierte de su mal camino! ¡Ciertamente son terribles la ira y el furor con que el Señor ha amenazado a este pueblo!»

Ezequiel 12:3

»Por tanto, hijo de hombre, prepara tu equipaje; prepáralo para el exilio, y a plena luz del día, a la vista de todos, saldrás como quien va exiliado sin destino fijo. Tal vez así entiendan, aunque son un pueblo rebelde.

Oseas 11:8

»¿Cómo podría yo entregarte, Efraín? ¿Cómo podría abandonarte, Israel? ¡Yo no podría entregarte como entregué a Admá! ¡Yo no podría abandonarte como a Zeboyín! Dentro de mí, el corazón me da vuelcos, y se me conmueven las entrañas.

Oseas 6:4

«¿Qué voy a hacer contigo, Efraín? ¿Qué voy a hacer contigo, Judá? Vuestro amor es como nube matutina, como rocío que temprano se evapora.

Mateo 17:5

Mientras estaba aún hablando, apareció una nube luminosa que los envolvió, de la cual salió una voz que dijo: «Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él. ¡Escuchadle!»

Mateo 3:17

Y, he aquí, una voz del cielo decía: «Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él».

Lucas 18:2

Les dijo: «Había en cierto pueblo un juez que no tenía temor de Dios ni consideración por nadie.

Lucas 18:4

Durante algún tiempo él se negó, pero por fin concluyó: “Aunque no temo a Dios ni tengo consideración por nadie,

Lucas 20:12

Entonces envió un tercero, pero aun a este lo hirieron y lo expulsaron.

Lucas 20:14

Pero, cuando lo vieron los labradores, dialogaron entre ellos. “Este es el heredero —dijeron—. Matémoslo, y la herencia será nuestra”.

Lucas 9:35

Entonces salió de la nube una voz que dijo: «Este es mi Hijo, mi escogido; escuchadle».

Juan 1:34

Yo lo he visto y por eso testifico que este es el Hijo de Dios».

Romanos 8:3

En efecto, la ley no pudo liberarnos porque la naturaleza pecaminosa anuló su poder; por eso Dios envió a su propio Hijo en condición semejante a nuestra condición de pecadores, para que se ofreciera en sacrificio por el pecado. Así condenó Dios al pecado en la naturaleza humana,

Gálatas 4:4

Pero, cuando se cumplió el plazo, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo la ley,