2 Samuel 21:17 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

¹⁷ Sin embargo, Abisay hijo de Sarvia fue en su ayuda e hirió al filisteo y lo mató. Allí los soldados de David le hicieron este juramento: «Nunca más saldrás con nosotros a la batalla, no sea que alguien te mate y se apague la lámpara de Israel».

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹⁷ mas Abisai hijo de Sarvia llegó en su ayuda, e hirió al filisteo y lo mató. Entonces los hombres de David le juraron, diciendo: Nunca más de aquí en adelante saldrás con nosotros a la batalla, no sea que apagues la lámpara de Israel.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁷ Pero Abisai, hijo de Sarvia, llegó al rescate de David y mató al filisteo. Entonces los hombres de David declararon: «¡No volverás a salir con nosotros a la batalla! ¿Por qué arriesgarnos a que se apague la luz de Israel?».

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁷ Pero Abisaí, hijo de Seruya, fue a auxiliar a David, hirió al filisteo y lo mató. Los hombres de David le insistieron entonces: 'No vengas más a la guerra con nosotros, pues no debe apagarse la lámpara de Israel'.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁷ Pero Abisai hijo de Sarvia lo ayudó, e hirió al filisteo y lo mató. Entonces los hombres de David le juraron diciendo: ¡No saldrás más con nosotros a la batalla, no sea que se apague la antorcha de Israel!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁷ Pero Abisay, hijo de Servia, lo protegió, hirió al filisteo y le mató. Entonces los hombres de David lo conjuraron y le dijeron: 'No salgas más con nosotros al combate, para que no apagues la lámpara de Israel'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁷ pero Abisai, hijo de Sarvia, le socorrió, e hirió al filisteo y lo mató. Entonces los hombres de David le juraron, diciendo: Nunca más de aquí en adelante saldrás con nosotros a la batalla, no sea que apagues la lámpara de Israel.

2 Samuel 21:17 Referencias Cruzadas

2 Samuel 14:7

Pero ahora resulta que toda la familia se ha puesto en contra de esta tu sierva. Me exigen que entregue al asesino para que lo maten, y así vengar la muerte de su hermano, aunque al hacerlo eliminen al heredero. La verdad es que de esa manera apagarían la última luz de esperanza que me queda, y dejarían a mi esposo sin nombre ni descendencia sobre la tierra.

2 Samuel 18:2

Los dividió en tres unidades y los envió a la batalla. La primera unidad estaba bajo el mando de Joab; la segunda, bajo el mando de Abisay, hijo de Sarvia y hermano de Joab; y la tercera, bajo el mando de Itay el guitita. ―Yo os voy a acompañar —dijo el rey.

2 Samuel 18:3

Pero los soldados respondieron: ―No, no debes acompañarnos. Si tenemos que huir, el enemigo no se va a ocupar de nosotros. Y, aunque la mitad de nosotros muera, a ellos no les va a importar. ¡Pero tú vales por diez mil de nosotros! Así que es mejor que te quedes y nos apoyes desde la ciudad.

2 Samuel 22:19

En el día de mi desgracia me salieron al encuentro, pero mi apoyo fue el Señor.

2 Samuel 22:29

Tú, Señor, eres mi lámpara; tú, Señor, iluminas mis tinieblas.

1 Reyes 11:36

Pero a su hijo le dejaré una sola tribu, para que en Jerusalén, la ciudad donde decidí habitar, la lámpara de mi siervo David se mantenga siempre encendida delante de mí.

1 Reyes 15:4

No obstante, por consideración a David, el Señor su Dios mantuvo la lámpara de David encendida en Jerusalén, dándole un hijo que le sucediera, para fortalecer así a Jerusalén.

Salmos 132:17

»Aquí haré renacer el poder de David, y encenderé la lámpara de mi ungido.

Salmos 144:10

Tú das la victoria a los reyes; a tu siervo David lo libras de la cruenta espada.

Salmos 46:1

Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia.

Jeremías 40:15

Y allí en Mizpa, Johanán hijo de Carea le propuso en secreto a Guedalías: ―Déjame ir a matar a Ismael hijo de Netanías. ¡Nadie tiene que enterarse! ¿Por qué vamos a permitir que te asesine? Eso causaría la dispersión de todos los judíos que se han reunido a tu alrededor, y acabaría con lo que queda de Judá.

Juan 5:35

Juan era una lámpara encendida y brillante, y vosotros decidisteis disfrutar de su luz por algún tiempo.