Proverbios 3:3 - Biblia Nueva Traducción Viviente

³ ¡Nunca permitas que la lealtad ni la bondad te abandonen! Átalas alrededor de tu cuello como un recordatorio. Escríbelas en lo profundo de tu corazón.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³ Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Átalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu corazón;

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ ¡Que no te falten ni la bondad ni la fidelidad! Atalas a tu cuello, inscríbelas en las tablillas de tu corazón;'

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad, Átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ No te abandonen la bondad y la lealtad: sujétalas a tu cuello, escríbelas en la tablilla de tu corazón

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³ Misericordia y verdad no se aparten de ti; átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón;

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

³ Ama siempre a Dios y sé sincero con tus amigos;

Proverbios 3:3 Referencias Cruzadas

2 Samuel 15:20

Llegaste hace poco, ¿debería forzarte a vagar con nosotros? Ni siquiera sé a dónde iremos. Regresa y llévate contigo a tus parientes, y que el Señor te muestre su amor inagotable y su fidelidad.

Salmos 119:11

He guardado tu palabra en mi corazón, para no pecar contra ti.

Salmos 25:10

El Señor guía con fidelidad y amor inagotable a todos los que obedecen su pacto y cumplen sus exigencias.

Salmos 85:10

El amor inagotable y la verdad se encontraron; ¡la justicia y la paz se besaron!

Éxodo 13:9

Este festival anual será para ustedes una señal visible, como una marca grabada en la mano o en la frente, que les recuerde recitar siempre esta enseñanza del Señor: “Con mano fuerte, el Señor los rescató de Egipto”.

Éxodo 34:6

El Señor pasó por delante de Moisés proclamando: «¡Yahveh! ¡El Señor! ¡El Dios de compasión y misericordia! Soy lento para enojarme y estoy lleno de amor inagotable y fidelidad.

Proverbios 1:9

Lo que aprendas de ellos te coronará de gracia y será como un collar de honor alrededor de tu cuello.

Proverbios 14:22

Si te propones hacer el mal, te perderás; si te propones hacer el bien, recibirás amor inagotable y fidelidad.

Proverbios 16:6

Con amor inagotable y fidelidad se perdona el pecado. Con el temor del Señor el mal se evita.

Proverbios 20:28

El amor inagotable y la fidelidad protegen al rey; su trono se afianza por medio de su amor.

Proverbios 6:21

Guarda siempre sus palabras en tu corazón; átalas alrededor de tu cuello.

Proverbios 7:3

Átalas a tus dedos como un recordatorio; escríbelas en lo profundo de tu corazón.

Jeremías 17:1

»El pecado de Judá está escrito con cincel de hierro, grabado con punta de diamante en su corazón de piedra y en las esquinas de sus altares.

Oseas 4:1

¡Escucha la palabra del Señor, oh pueblo de Israel! El Señor ha presentado cargos en tu contra, diciendo: «No hay fidelidad, ni bondad ni conocimiento de Dios en tu tierra.

Malaquías 2:6

Comunicaron al pueblo la verdad de las instrucciones que recibieron de mí. No mintieron ni estafaron; anduvieron conmigo y llevaron vidas buenas y justas e hicieron volver a muchas personas de sus vidas pecaminosas.

Mateo 23:23

»¡Qué aflicción les espera, maestros de la ley religiosa y fariseos! ¡Hipócritas! Pues se cuidan de dar el diezmo sobre el más mínimo ingreso de sus jardines de hierbas, pero pasan por alto los aspectos más importantes de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Es cierto que deben diezmar, pero sin descuidar las cosas más importantes.

2 Corintios 3:3

Es evidente que son una carta de Cristo que muestra el resultado de nuestro ministerio entre ustedes. Esta «carta» no está escrita con pluma y tinta, sino con el Espíritu del Dios viviente. No está tallada en tablas de piedra, sino en corazones humanos.

Efesios 5:9

Pues esa luz que está dentro de ustedes produce solo cosas buenas, rectas y verdaderas.

Deuteronomio 6:8

Átalos a tus manos y llévalos sobre la frente como un recordatorio.

Hebreos 10:16

«Este es el nuevo pacto que haré con mi pueblo en aquel día, dice el Señor: Pondré mis leyes en su corazón y las escribiré en su mente».