Juan 13:20 - Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁰ Les digo la verdad, todo el que recibe a mi mensajero me recibe a mí, y el que me recibe a mí recibe al Padre, quien me envió.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²⁰ De cierto, de cierto os digo: El que recibe al que yo enviare, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁰ En verdad les digo: el que reciba al que yo envíe, a mí me recibe, y el que me reciba a mí, recibe al que me ha enviado.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁰ En verdad, en verdad os digo: El que recibe al que Yo envíe, me recibe a mí, y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁰ De verdad os lo aseguro: el que reciba al que yo envíe, a mí me recibe; y el que a mí me recibe, recibe al que me ha enviado'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²⁰ De cierto, de cierto os digo: El que recibe al que yo enviare, a mí me recibe; y el que a mí recibe, recibe al que me envió.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

²⁰ Si alguien recibe al que yo envío, me recibe a mí. Y el que me recibe a mí, recibe también al que me envió.»

Juan 13:20 Referencias Cruzadas

Mateo 25:40

»Y el Rey dirá: “Les digo la verdad, cuando hicieron alguna de estas cosas al más insignificante de estos, mis hermanos, ¡me lo hicieron a mí!”.

Marcos 9:37

«Todo el que recibe de mi parte a un niño pequeño como este me recibe a mí, y todo el que me recibe, no solo me recibe a mí, sino también a mi Padre, quien me envió».

Lucas 10:16

Entonces dijo a sus discípulos: «El que acepta el mensaje de ustedes me acepta también a mí. El que los rechaza a ustedes a mí me rechaza. Y el que me rechaza a mí rechaza a Dios, quien me envió».

Lucas 9:48

Luego les dijo: «Todo el que recibe de mi parte a un niño pequeño como este, me recibe a mí; y todo el que me recibe a mí, también recibe al Padre, quien me envió. El más insignificante entre ustedes es el más importante».

Gálatas 4:14

Aunque mi condición los tentaba a no aceptarme, ustedes no me despreciaron ni me rechazaron. Todo lo contrario, me recibieron y me cuidaron como si yo fuera un ángel de Dios o incluso el mismo Cristo Jesús.

Colosenses 2:6

Por lo tanto, de la manera que recibieron a Cristo Jesús como Señor, ahora deben seguir sus pasos.

1 Tesalonicenses 4:8

Por lo tanto, todo el que se niega a vivir de acuerdo con estas reglas no desobedece enseñanzas humanas sino que rechaza a Dios, quien les da el Espíritu Santo.