Hechos 9:23 - Biblia Nueva Traducción Viviente

²³ Poco tiempo después, unos judíos conspiraron para matarlo.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²³ Pasados muchos días, los judíos resolvieron en consejo matarle;

Biblia Católica (Latinoamericana)

²³ Después de bastante tiempo los judíos decidieron matarlo,

La Biblia Textual 3a Edicion

²³ Cuando habían pasado muchos días, los judíos tramaron darle muerte,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²³ Pasados bastantes días, decidieron los judíos quitárselo de en medio.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²³ Y después de muchos días, los judíos tomaron entre sí consejo para matarle;

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

²³ Tiempo después, se pusieron de acuerdo para matarlo;

Hechos 9:23 Referencias Cruzadas

Hechos 13:50

Luego los judíos provocaron a las mujeres religiosas influyentes y a los líderes de la ciudad, e incitaron a una turba contra Pablo y Bernabé, y los echaron de la ciudad.

Hechos 14:19

Luego unos judíos llegaron de Antioquía e Iconio, y lograron poner a la multitud de su lado. Apedrearon a Pablo y lo arrastraron fuera de la ciudad, pensando que estaba muerto;

Hechos 14:2

Sin embargo, algunos de los judíos rechazaron el mensaje de Dios y envenenaron la mente de los gentiles en contra de Pablo y Bernabé;

Hechos 15:26

quienes han arriesgado la vida por el nombre de nuestro Señor Jesucristo.

Hechos 20:3

donde se quedó tres meses. Se preparaba para regresar en barco a Siria cuando descubrió que unos judíos tramaban una conspiración contra su vida; entonces decidió regresar por Macedonia.

Hechos 23:12

A la mañana siguiente, un grupo de judíos se reunió y se comprometió mediante un juramento a no comer ni beber hasta matar a Pablo.

Hechos 9:16

y le voy a mostrar cuánto debe sufrir por mi nombre.

Hechos 9:22

La predicación de Saulo se hacía cada vez más poderosa, y los judíos de Damasco no podían refutar las pruebas de que Jesús de verdad era el Mesías.

2 Corintios 11:26

He estado en muchos viajes muy largos. Enfrenté peligros de ríos y de ladrones. Enfrenté peligros de parte de mi propio pueblo, los judíos, y también de los gentiles. Enfrenté peligros en ciudades, en desiertos y en mares. Y enfrenté peligros de hombres que afirman ser creyentes, pero no lo son.