Proverbios 18:10 - Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁰ El nombre de Yavé es una fortaleza; allí acude el justo y encuentra seguridad.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹⁰ Torre fuerte es el nombre de Jehová; A él correrá el justo, y será levantado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁰ El nombre del Señor es una fortaleza firme; los justos corren a él y quedan a salvo.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁰ Torre fuerte es el nombre de YHVH, A ella corre el justo y es inaccesible.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁰ Torre fuerte es el nombre de Yahveh: en él se refugia el justo y vive seguro.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁰ Torre fuerte es el nombre de Jehová; a Él correrá el justo, y estará a salvo.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹⁰ Dios es como una alta torre; hacia él corren los buenos para ponerse a salvo.

Proverbios 18:10 Referencias Cruzadas

Génesis 17:1

Tenía Abram noventa y nueve años, cuando se le apareció Yavé y le dijo: 'Yo soy el Dios de las Alturas. Camina en mi presencia y sé perfecto.

Génesis 32:11

Yo no soy digno de todos los favores que me has hecho, ni de la gran bondad que has tenido conmigo. Porque al partir, cuando atravesé el Jordán, no tenía más que mi bastón. Pero ahora, al volver, tengo suficiente como para hacer dos campamentos.

2 Samuel 22:2

Yavé es mi roca, y mi fortaleza, mi salvador y mi Dios.

2 Samuel 22:3

El es mi roca, en él me refugio. Es mi escudo, mi salvación, mi ciudadela y mi refugio: mi salvador me salva de la violencia.

2 Samuel 22:51

Le da a su rey victoria tras victoria, y sigue con sus favores a su ungido, a David y a su raza para siempre'.

Salmos 144:2

El es mi refugio y mi baluarte, mi fortaleza y mi libertador, mi escudo en que me amparo, él humilla a los pueblos a mis pies.

Salmos 18:2

El Señor es mi roca y mi fortaleza; es mi libertador y es mi Dios, es la roca que me da seguridad; es mi escudo y me da la victoria.

Salmos 20:2

Que del Santuario te envíe socorro y desde Sión te venga su auxilio.

Salmos 27:1

El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién he de temer? Amparo de mi vida es el Señor, ¿ante quién temblaré?

Salmos 91:14

Pues a mí se acogió, lo libraré, lo protegeré, pues mi Nombre conoció.

Salmos 91:2

dile al Señor: 'Mi amparo, mi refugio, mi Dios, en quien yo pongo mi confianza'.

Éxodo 6:3

Me di a conocer a Abrahán, a Isaac y a Jacob como Dios de las Alturas, pues no quise revelarles este nombre mío: Yavé.

Proverbios 14:26

El que teme a Yavé tiene un apoyo firme, sus hijos podrán confiar en él.

Proverbios 29:25

Es una trampa temblar ante los hombres: el que confía en Yavé está seguro.

Isaías 26:4

No duden nunca de Yavé, pues Yavé es la Roca para siempre.

Isaías 57:15

Pues así habla el Altísimo, que vive en su morada eterna, y cuyo Nombre es santo: 'Yo vivo en lo alto y me quedo en mi santidad, pero también estoy con el hombre arrepentido y humillado, para reanimar el espíritu de los humildes y a los de corazón quebrantado.

Isaías 9:6

El imperio crece con él y la prosperidad no tiene límites, para el trono de David y para su reino: El lo establece y lo afianza por el derecho y la justicia, desde ahora y para siempre. Sí, así será, por el amor celoso de Yavé Sabaot.

Jeremías 23:6

El gobernará este país según la justicia y el derecho. En aquel tiempo Judá gozará de paz, e Israel permanecerá seguro. Y éste es el nombre que le darán: Yavé-nuestra-justicia.

Habacuc 3:19

Yavé, que es mi Señor, es mi fuerza el da a mis pies la agilidad de un ciervo y me hace caminar por las alturas. Salmo para el maestro del coro, con instrumentos de cuerdas.

Mateo 1:23

La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que significa: Dios-con-nosotros.

Apocalipsis 1:8

Yo soy el Alfa y la Omega, dice el Señor Dios, Aquel que Es, que era y que ha de venir, el Todopoderoso.

1 Samuel 17:45

David respondió al filisteo: 'Tú me atacas con la espada, la lanza y la jabalina, pero yo me lanzo contra ti en nombre de Yavé de los ejércitos, el Dios de las tropas de Israel que has insultado.

1 Samuel 30:6

David se vio en un gran apuro porque su gente hablaba de apedrearlo, pues tan grande era la desesperación de cada uno por sus hijos e hijas. Pero David recuperó su confianza en Yavé su Dios.