Jonás 1:2 - Biblia Católica (Latinoamericana)

² Levántate, vete a Nínive, la ciudad grande, y predica contra ellos, porque su maldad ha subido hasta mí.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

² Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí.

Biblia Nueva Traducción Viviente

² «Levántate y ve a la gran ciudad de Nínive. Pronuncia mi juicio contra ella, porque he visto lo perversa que es su gente».

La Biblia Textual 3a Edicion

² Levántate y vete a Nínive,° la gran metrópoli, y proclama en ella que su maldad ha llegado hasta mí.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² 'Anda, vete a Nínive, la gran ciudad, y anúnciale que su maldad ha subido hasta mí'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

² Levántate, y ve a Nínive, la gran ciudad, y pregona contra ella; porque su maldad ha subido delante de mí.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

² «¡Levántate, ve a la gran ciudad de Nínive y diles que ya he visto lo malvados que son!»

Jonás 1:2 Referencias Cruzadas

Génesis 10:11

De este país salió para Asur, donde edificó Nínive, Rejobot-Ir, Calaj

2 Reyes 19:36

Senaquerib, rey de Asur, se fue y se volvió para quedarse en Nínive.

2 Crónicas 28:9

Había allí un profeta de Yavé, llamado Obred, que salió al encuentro del ejército que volvía a Samaria y les dijo: 'Miren que Yavé, el Dios de sus padres, estaba irritado contra la gente de Judá y por esto los ha entregado en manos de ustedes. Pero ustedes los han matado con una crueldad increíble.

Esdras 9:6

y le dije: 'Estoy tan avergonzado y confundido que no me atrevo a levantar mi cara hacia ti, Dios mío. Nuestras faltas se han acumulado de tal forma que han sobrepasado nuestras cabezas, y nuestro pecado ha subido hasta el Cielo.

Isaías 37:37

Senaquerib levantó su campamento y se fue. Y de regreso se quedó en Nínive. Un día, mientras estaba adorando, dentro del templo, a Nisroc, su dios, sus hijos Adramelec y Sareser lo asesinaron a puñaladas y se pusieron a salvo en el país de Ararat. Le sucedió en el trono su hijo Asaradón.

Isaías 58:1

Grita con fuerza y sin miedo. Levanta tu voz como trompeta y denuncia a mi pueblo sus maldades, y sus pecados a la familia de Jacob.

Jeremías 20:9

Por eso, decidí no recordar más a Yavé, ni hablar más en su nombre, pero sentía en mí algo así como un fuego ardiente aprisionado en mis huesos, y aunque yo trataba de apagarlo, no podía.

Ezequiel 2:7

Les transmitirás mis palabras, te escuchen o no, porque son una raza de rebeldes.

Oseas 7:2

Ellos no se fijan que tengo presente su maldad. Ahora mismo sus obras están delante de mí acusándolos.

Jonás 3:2

Levántate, vete a Nínive, la gran ciudad, y anuncia lo que yo te diga.

Jonás 3:3

Se levantó Jonás y fue a Nínive, como se lo había ordenado Yavé. Nínive era una ciudad muy grande. Se necesitaban tres días para atravesarla.

Jonás 4:11

¿Cómo, pues, yo no voy a tener lástima de Nínive, la gran ciudad, donde hay más de ciento veinte mil personas que no saben distinguir el bien y el mal, y gran cantidad de animales?'

Miqueas 3:8

Yo, al contrario, estoy lleno del espíritu de Yavé. El me da celo por la justicia, me llena de fuerza y de ánimo para denunciar a Jacob su pecado, para descubrir las faltas de Israel.

Nahum 1:1

Palabras contra Nínive. Este es el libro de la visión que tuvo Nahúm de Elcós.

Nahum 3:19

¡No hay remedio para tu herida, tu llaga es incurable! Todos los que oyen aplauden por tu ruina; pues, ¿sobre quién no pesó constantemente tu crueldad?'

Mateo 10:18

Ustedes incluso serán llevados ante gobernantes y reyes por causa mía, y tendrán que dar testimonio ante ellos y los pueblos paganos.

Mateo 12:41

Los hombres de Nínive resucitarán en el día del juicio junto con esta generación y la condenarán, porque ellos cambiaron su conducta ante la predicación de Jonás, y aquí ustedes tienen mucho más que Jonás.

Santiago 5:4

El salario de los trabajadores que cosecharon sus campos se ha puesto a gritar, pues ustedes no les pagaron; las quejas de los segadores ya habían llegado a los oídos del Señor de los ejércitos.

Apocalipsis 18:5

porque sus pecados se han apilado hasta el cielo y Dios se ha acordado de sus maldades.