Génesis 25:30 - La Torah

³⁰ Dijo Esaú a Jacob: 'Oye, dame a probar de lo rojo, de eso rojo, porque estoy agotado.' - Por eso se le llamó Edom. -

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³⁰ dijo a Jacob: Te ruego que me des a comer de ese guiso rojo, pues estoy muy cansado. Por tanto fue llamado su nombre Edom.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁰ Esaú le dijo a Jacob: —¡Me muero de hambre! ¡Dame un poco de ese guiso rojo! (Así es como Esaú obtuvo su otro nombre, Edom, que significa «rojo»).

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁰ Dijo Esaú a Jacob: 'Por favor, dame un poco de ese guiso rojizo, pues estoy hambriento' (por eso fue llamado Edom, o sea, rojizo).

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁰ Entonces dijo Esaú a Jacob: Te ruego, déjame engullir de eso rojo,° porque estoy desfallecido. (Por eso le llaman Edom°).

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁰ Dijo Esaú a Jacob: 'Déjame probar ese guiso rojo, que estoy exhausto'. De ahí le viene el nombre de Edom.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁰ dijo a Jacob: Te ruego que me des a comer de ese potaje rojo, pues estoy muy cansado. Por tanto, fue llamado su nombre Edom.

Génesis 25:30 Referencias Cruzadas

Génesis 25:29

Una vez, Jacob había preparado un guiso cuando llegó Esaú del campo, agotado.

Génesis 25:31

Dijo Jacob: 'Véndeme ahora mismo tu primogenitura.'

Génesis 32:3

Al verlos, dijo Jacob: 'Este es el campamento de Di-s'; y llamó a aquel lugar Majanáyim.

Génesis 32:4

Jacob envió mensajeros por delante hacia su hermano Esaú, al país de Seír, la estepa de Edom,

Génesis 36:1

Este es el linaje de Esaú, o sea Edom.

Génesis 36:19

Estos son los hijos de Esaú y éstos sus jeques, los de Edom.

Génesis 36:43

el jeque Magdiel, el jeque Iram. Estos son los jeques de Edom, según sus moradas, en las tierras que ocupan. Este es Esaú padre de Edom.

Génesis 36:8

Esaú se estableció, pues, en la tierra de Seír. Esaú es Edom.

Génesis 36:9

Estos son los descendientes de Esaú, padre de Edom, en la montaña de Seír,

Éxodo 15:15

Los príncipes de Edom se estremecieron, se angustiaron los jefes de Moab y todas las gentes de Canaán temblaron.

Deuteronomio 23:7

(8) No tendrás por abominable al idumeo, porque es tu hermano; tampoco al egipcio tendrás por abominable, porque fuiste forastero en su país.