Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





1 Samuel 3:2 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

2 Y aconteció un día, que estando Elí acostado en su aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse, que no podía ver,

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

2 Y aconteció un día, que estando Elí acostado en su aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver,

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Una noche, Elí, que para entonces estaba casi ciego, ya se había acostado.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Ese día estaba Helí acostado en su cama; sus ojos estaban tan débiles que ya no veía.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Por ese tiempo aconteció que estando Elí acostado en su aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse y no podía ver,

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Cierto día Elí estaba ya acostado en su aposento. Sus ojos habían comenzado a debilitarse y no podía ver.

Ver Capítulo Copiar




1 Samuel 3:2
8 Referencias Cruzadas  

Y aconteció que cuando Isaac envejeció, y sus ojos se oscurecieron de vista, llamó a Esaú, su hijo el mayor, y le dijo: Mi hijo. Y él respondió: Heme aquí.


Y los ojos de Israel estaban ya tan agravados de la vejez, que no podía ver. Y les hizo llegar a él, y él los besó y abrazó.


Mas su padre no quiso, y dijo: Lo sé, hijo mío, lo sé; también él vendrá a ser un pueblo, y será también acrecentado; pero su hermano menor será más grande que él, y su simiente será plenitud de gentiles.


Y la mujer de Jeroboam lo hizo así; y se levantó, y fue a Silo, y vino a casa de Ahías. Y Ahías ya no podía ver, que sus ojos se habían oscurecido a causa de su vejez.


Los días de nuestra edad son setenta años; y de los más valientes, ochenta años, y su fortaleza es molestia y trabajo; porque es cortado presto, y volamos.


cuando temblarán los guardas de la casa, y se encorvarán los hombres fuertes, y cesarán las muelas, porque han disminuido, y se oscurecerán los que miran por las ventanas;


Elí empero era muy viejo, y oía todo lo que sus hijos hacían a todo Israel, y cómo dormían con las mujeres que velaban a la puerta del tabernáculo del testimonio.


Era ya Elí de edad de noventa y ocho años, y sus ojos se habían oscurecido, de modo que no podía ver.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos