Después Amasías reunió a los de Judá y los ordenó conforme a sus casas paternas, bajo capitanes de millares y capitanes de centenas, por todo Judá y Benjamín. E hizo un censo de ellos, de veinte años arriba, de los cuales había° trescientos mil escogidos, que salían a la guerra y portaban lanza y pavés.
Pero un varón de Dios fue a él, diciendo: Oh rey, no dejes que el ejército de Israel vaya contigo, porque YHVH no está con Israel ni con ninguno de los hijos de Efraín.
Y viendo los amonitas que se habían hecho aborrecibles a David, Hanún y los amonitas enviaron mil talentos de plata para tomar a sueldo carros de guerra y gente de a caballo de Mesopotamia, de Siria, de Maaca y de Soba.