3 Habíanse extraviado unas asnas de Quis, padre de Saúl, por lo que Quis dijo a su hijo Saúl: 'Toma contigo a uno de los criados y vete a buscar las asnas'.
3 Y se habían perdido las asnas de Cis, padre de Saúl; por lo que dijo Cis a Saúl su hijo: Toma ahora contigo alguno de los criados, y levántate, y ve a buscar las asnas.
3 Como se perdieran las burras de Quis, el padre de Saúl, aquél dijo a su hijo Saúl: 'Llévate contigo a uno de los sirvientes y anda a buscar las burras'.
3 Y las asnas de Cis, el padre de Saúl, se habían perdido, por lo cual dijo Cis a su hijo Saúl: Toma ahora contigo a uno de los criados, levántate, y ve en busca de las asnas.
3 Y se habían perdido las asnas de Cis, padre de Saúl; por lo que dijo Cis a Saúl su hijo: Toma ahora contigo alguno de los criados, y levántate, y ve a buscar las asnas.
cuando hoy te alejes de mí, encontrarás dos hombres junto al sepulcro de Raquel, en los confines de Benjamín, en Selsaj, los cuales te dirán: 'Ya han aparecido las asnas que fuiste a buscar. Tu padre ya no se preocupa del asunto de las asnas; pero está intranquilo por vosotros, y se pregunta: ¿Qué haré yo por saber de mi hijo?'.
Tenía treinta hijos que montaban treinta pollinos y eran dueños de treinta poblados, llamados todavía hoy Poblados de Yaír, en el territorio de Galaad.
Tenía un hijo, llamado Saúl, joven gallardo y de buena presencia. Nadie había entre los israelitas de mejor presencia que él: por su estatura aventajaba a todo el pueblo de hombros arriba.
Recorrió los montes de Efraín y la tierra de Salisá, sin encontrarlas. Atravesaron luego la comarca de Saalín, pero en vano. Recorrieron la tierra de Benjamín y tampoco dieron con ellas.
Y en cuanto a las asnas que se te extraviaron hace tres días, no te preocupes por ellas; ya han aparecido. Por otra parte, ¿a quién pertenece lo más precioso de Israel, sino a ti y a toda la casa de tu padre?'.