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Oseas 14:3 - Biblia Nacar-Colunga

3 Buscad palabras y retornad a Yahvé, diciendo: Perdona toda iniquidad y acepta lo bueno, y pagaremos con el fruto de nuestros rediles1.

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Biblia Reina Valera 1960

3 No nos librará el asirio; no montaremos en caballos, ni nunca más diremos a la obra de nuestras manos: Dioses nuestros; porque en ti el huérfano alcanzará misericordia.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Asiria no puede salvarnos, ni nuestros caballos de guerra. Nunca más diremos a ídolos que hemos hecho: “Ustedes son nuestros dioses”. No, solamente en ti los huérfanos encuentran misericordia».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Preparen sus palabras y vuelvan a Yavé para decirle: '¡Quita el pecado y acepta lo bueno, que esta confesión nuestra reemplace cualquier ofrenda!'

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La Biblia Textual 3a Edicion

3 Asiria no nos salvará; Ya no montaremos a caballo, Ni diremos más a la hechura de nuestras manos: ¡Dioses nuestros sois!° Porque sólo en ti halla misericordia el huérfano.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Llevad preparadas las palabras y volved a Yahveh. Decidle: 'Perdona toda iniquidad, para que recibamos tus bienes, y te ofrezcamos el fruto de nuestros labios.

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Oseas 14:3
36 交叉引用  

Cantad a Dios, ensalzad su nombre, allanad el camino al que viene cabalgando por el desierto: Yahvé es su nombre; exultad ante El.'


Resh. Tú lo ves, porque miras las penas y los trabajos para retribuir con tu mano. A ti se te confía el miserable, tú eres el auxilio del huérfano.


Volverán a habitar bajo su sombra, creciendo como el trigo, pujando como la vid, y su fama será como la del vino del Líbano.


Efraím ve su debilidad, y ve Judá su llaga. Y Efraím se vuelve a Asiría, y mandó embajadores al rey grande, pero no podrá curaros ni sanar la llaga,


(19) Quitará de su boca los nombres de los baales, para que rio vuelva nunca a mencionarlos por su nombre.


Ay de los que bajan a Egipto en busca de socorro, y confían en los caballos, y en la multitud de carros ponen su esperanza, y en la fuerza de los jinetes! Pero no miran al Santo de Israel y no buscan a Yahvé.


pero no habéis querido, y habéis dicho: No, huiremos en caballos (por eso huiréis), y sobre ligeros (corceles) cabalgaremos. Por eso correrán veloces vuestros perseguidores.


Vano es para la victoria el caballo, pues con todo su vigor no libra.


No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.'


Efraím me envuelve en la mentira, y la casa de Israel en el fraude. Y Judá es un testigo traidor a Dios, pero fiel a las hieródulas.


Por ellos subieron a Asiría. El onagro busca estar solo, Efraím se entregó a los amantes.


Porque de Israel son, son obra de artífice, no son de Dios, y será llevado cautivo el día de Yahvé l el becerro de Samaría.


Efraím se ha tornado en paloma estúpida, sin juicio; acuden a Egipto, se dirigen a Asiría.'


nunca más se contaminarán con sus ídolos; los libraré de todas las rebeliones con que pecaron y los purificaré, y serán mi pueblo, y yo seré su Dios.'


Y os aspergeré con aguas puras y os purificaré de todas vuestras impurezas, de todas vuestras idolatrías.


Haz, pues, una apuesta con mi señor, rey de Asiría; yo te daré dos mil caballos si tú eres capaz de aportar otros tantos jinetes sobre ellos.'


El egipcio es un hombre, no es un dios, y sus caballos son carne, no son espíritu. Y en tendiendo Yahvé su mano, caerá el protector y caerá el protegido, ambos juntamente perecerán.


Toman el camino para bajar a Egipto sin haber consultado a mi boca, para refugiarse al amparo del faraón, para abrigarse a la sombra de Egipto.


Por eso, con esto se expió el crimen de Jacob, y éste es todo el fruto del alejamiento de su pecado: que ponga todas las piedras del altar como piedras calizas dispersadas, de modo que no se levanten “asneras” y estelas solares.


Aquel día arrojará el hombre, entre topos y murciélagos, sus ídolos de plata y sus ídolos de oro, que se hizo para adorarlos,


Los impíos, los pecadores, todos a una serán quebrantad dos; los desertores de Yahvé serán aniquilados.'


Yahvé guarda a los peregrinos, sustenta al huérfano y a la viuda, pero trastorna las sendas de los impíos.


No confiéis en los príncipes, en los hijos del hombre, que no salvan.


Por aquel tiempo, Jananí el vidente fue a Asa, rey de Judá, y le dijo: “Por haberte apoyado sobre el rey de Siria y no sobre Yahvé, tu Dios, se te ha escapado de las manos el ejército del rey de Siria.


pero que no tenga gran número de caballos ni pretenda volver al pueblo a Egipto, porque Yahvé, tu Dios, ha dicho: “No volváis nunca jamás por ese camino.”


y aquel día, dice Yahvé, extirparé de la tierra los nombres de los ídolos, que no serán más recordados, y haré desaparecer a los profetas y el espíritu impuro.


Mi pueblo pregunta al leño, y su bastón le hace revelaciones, porque el espíritu de fornicación le ha descarriado y fornicaron, alejándose de su Dios.


Y ahora continúan pecando; de su plata se hacen obras fundidas, ídolos de su invención, obra de artífices todo ello. Y a ellos dirigen la palabra, ofrecen sacrificios. ¡Hombres dando besos a los becerros!'


Pero yo te ofreceré víctimas acompañadas de alabanzas, te cumpliré mis votos. De Yahvé es la salvación,


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