2 Salomón convocó a todos los líderes de Israel: a los generales y a los capitanes del ejército, a los jueces, y a todos los jefes políticos y de clanes.
2 Y habló Salomón a todo Israel: a los capitanes de millares y de centenas, y a los jueces, y a todos los príncipes de todo Israel, cabezas de las casas paternas.
2 Entonces Salomón convocó a todo Israel, a los jefes de millares y de centenas, a los jueces y a los príncipes de todo Israel, jefes de las casas paternas.
David convocó a Jerusalén a todos los jefes de Israel; a los jefes de las tribus, a los jefes de las divisiones al servicio del rey, a los jefes de millares y de centenas, a los intendentes de la hacienda y de los ganados del rey, a los hijos del rey, a los eunucos y oficiales del palacio, a todos los hombres de valer;'
El número de los hijos de Israel que entraban en servicio de tropa para la guardia del rey, que se relevaba todos los meses del año según la distribución que de ellos se había hecho, era de veinticuatro mil cada vez; cada tropa tenía sus jefes de casas paternas, sus jefes de millar y de centena y sus oficiales al servicio del rey.'
Después dijo David a toda la asamblea: “Sólo a Salomón, mi hijo, ha elegido Dios; es joven y de corta edad, y es grande la obra, porque la casa no es para hombres, sino para Yahvé Dios.'
También ellos, como los hijos de Aarón fueron sorteados ante David, Sadoc, Ajimelec y los jefes de las casas paternas de sacerdotes y levitas. Todo se hizo por suerte para distribuir igualmente los oficios, siendo el jefe de familia como el menor de sus hermanos.
Hubo entre los hijos de Eleazar más jefes que entre los hijos de Itamar, y se hizo esta división: los hijos de Eleazar tenían dieciséis jefes de casas paternas, y los hijos de Itamar, ocho.
y les dijo: “Vosotros sois los jefes de familia de los Isvitas; santifícaos vosotros y vuestros hermanos para subir el arca de Yahvé, del Dios de Israel, al lugar que yo le he preparado.'
y fue Salomón con toda la asamblea al alto de Gabaón, donde estaba el tabernáculo del testimonio de Dios, que Moisés, siervo de Yahvé, había hecho en el desierto.