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111 Versículos de la Biblia sobre la Ayuda
Y sabemos que Dios ordena todas las cosas para bien de los que le aman, de los que han sido elegidos según su designio.
Nosotros, los fuertes, debemos sobrellevar las deficiencias de los débiles y no buscar lo que nos agrada a nosotros mismos.
No os olvidéis de hacer el bien y de compartir vuestros bienes con los demás, pues ésos son los sacrificios que agradan a Dios.
Igulmente, el Espíritu viene en ayuda de nuestra flaqueza, porque no sabemos lo que nos conviene, pero el mismo Espíritu intercede por nosotros con gemidos inenarrables.
No te dejaré ni te abandonaré; de suerte que podemos decir con confianza: El Señor es mi auxilio; no temeré. ¿Qué podrán hacerme los hombres?
Ayúdanos, oh Dios, salvador nuestro, por la gloria de tu nombre; líbranos, perdona nuestros pecados, por el honor de tu nombre.
El Señor es mi fortaleza, él es mi escudo; mi corazón confió en él, y él me socorrió; me alegro de todo corazón y le doy gracias cantando.
Confía en el Señor de todo corazón y no te apoyes sobre tu propia prudencia. En todos tus caminos piensa en él, y él allanará tus senderos.
no temas, porque yo estoy contigo; no te asustes, pues yo soy tu Dios. Yo te doy fuerza, soy tu auxilio y te sostengo con mi diestra victoriosa. DIOS
si das al hambriento tu pan y sacias el apetito del oprimido, brillará en las tinieblas tu luz, y tus sombras se harán un mediodía.
Él reserva su auxilio para los hombres rectos, es un escudo para los que proceden con honestidad.
Bendito sea Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, padre de las misericordias y de todo consuelo, que nos consuela en todos nuestros sufrimientos para que nosotros podamos consolar a todos los que sufren con el consuelo que nosotros mismos recibimos de Dios.
Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia, a fin de obtener misericordia y hallar la gracia del auxilio oportuno.
Pues yo, el Señor, tu Dios, te cojo de la diestra y te digo: No temas, que yo vengo a ayudarte.
Si pasas por las aguas, yo estaré contigo; si por ríos, no te ahogarás. Si caminas por el fuego, no te quemarás, y las llamas no te abrasarán.
Al maestro de coro. Salmo de David En el Señor he puesto toda mi esperanza, él se inclinó hacia mí y escuchó mi grito;
Os he dicho estas cosas para que tengáis paz en mí. En el mundo tendréis tribulaciones; pero tened ánimo, que yo he vencido al mundo'.
El que desprecia a su prójimo comete pecado, dichoso el que tiene piedad de los pobres.
Hermanos, os pedimos también que corrijáis a los indisciplinados, que animéis a los cobardes, que sostengáis a los débiles y que seáis pacientes con todos.
Al maestro de coro. Según Yedutún. Salmo de David Mi alma sólo descansa en Dios, mi salvación viene de él;
Venid a mí todos los que estáis cansados y oprimidos, y yo os aliviaré. Cargad con mi yugo y aprended de mí, que soy afable y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera'.
Amaos de corazón unos a otros, como buenos hermanos; que cada uno ame a los demás más que a sí mismo.
Que se alegren y se regocijen en ti todos los que te buscan; que no dejen de decir: 'Dios es grande', los que anhelan tu salvación.
Y Dios puede volcar sus gracias sobre vosotros, para que, teniendo siempre lo suficiente en todo, crezcáis en toda obra buena.
si me llama, yo le responderé, estaré con él en la desgracia, lo libraré y lo llenaré de honores;
Dios os ama y os ha elegido para que seáis miembros de su pueblo. Por tanto, sed compasivos, bondadosos, humildes, pacientes y comprensivos.
Yo te ensalzo, Señor, porque me has liberado, porque no has dejado que se rían de mí mis enemigos.
Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui emigrante y me acogisteis,
pero Dios mostró su amor para con nosotros en que, siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
y miremos los unos por los otros para estimularnos en el amor y en las obras buenas; no abandonéis vuestras propias asambleas, como algunos tienen por costumbre hacer, sino más bien animaos mutuamente, y esto tanto más cuanto que veis acercarse el día.
El Señor Dios dijo: 'No es bueno que el hombre esté solo; le daré una ayuda apropiada'.
Si alguno tiene bienes de este mundo, ve a su hermano en la necesidad y le cierra sus entrañas, ¿cómo puede estar en él el amor de Dios?
Yo quiero enseñarte, indicarte el camino que tienes que seguir, quiero darte un consejo, quiero mirar por ti.
Abre tu boca, pronuncia justas sentencias y haz justicia al desventurado y al pobre.
pues sé que esto redundará en provecho mío por vuestra oración y la asistencia del Espíritu de Jesucristo.
Dichoso el que tiene su ayuda en el Dios de Jacob, y su esperanza en el Señor, su Dios,
Al maestro de coro. Según 'No destruyas'. Poema de David. Cuando Saúl mandó gente a vigilar su casa con ánimo de matarlo
Vacilarán los montes, las colinas se conmoverán; pero mi bondad hacia ti no desaparecerá ni vacilará mi alianza de paz -dice el Señor-, el que de ti se compadece.
Y Dios, que da la paciencia y el consuelo, os conceda vivir en armonía unos con otros a ejemplo de Jesucristo, para que con un solo corazón y todos a una podáis dar gloria a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo.
Hermanos, vosotros habéis sido llamados a ser hombres libres; pero procurad que la libertad no sea un pretexto para dar rienda suelta a las pasiones, antes bien, servíos unos a otros por amor.
Pero el Señor espera la hora de otorgaros su gracia; por eso se levanta para apiadarse de vosotros, porque el Señor es un Dios de justicia; felices los que en él esperan.
Salmo de David en verdes praderas me hace reposar, me conduce hacia las aguas del remanso y conforta mi alma; me guía por los senderos de justicia, por amor a su nombre;
Tú que vives bajo la protección del Dios altísimo y moras a la sombra del Dios omnipotente, di al Señor: 'Eres mi fortaleza y mi refugio, eres mi Dios, en quien confío'.
El Señor será tu guía siempre, en los desiertos saciará tu hambre, a tus huesos infundirá vigor, y tú serás como un huerto regado, cual manantial de agua, de caudal inagotable.
Así que no os inquietéis por el día de mañana, que el mañana traerá su inquietud. A cada día le bastan sus problemas'.
No te tengas por sabio; teme al Señor y apártate del mal; esto será medicina para tu carne y refrigerio para tus huesos.
Que cada cual ponga al servicio de los demás los dones que haya recibido como corresponde a buenos administradores de los distintos carismas de Dios;
Al maestro de coro. Salmo de David sabes cuándo me acuesto y cuándo me levanto, desde lejos te das cuenta de mis pensamientos;
No os ha llegado ninguna prueba insuperable. Dios es fiel y no permitirá que seáis sometidos a pruebas superiores a vuestras fuerzas; ante la prueba os dará fuerza para superarla.
Mi Dios, a su vez, proveerá colmadamente a vuestra indigencia, según sus riquezas, en Cristo Jesús.
He aquí que un rey reinará con justicia y príncipes gobernarán según derecho. Cada uno será como un refugio contra el viento y un abrigo contra la tempestad; como corrientes de agua en tierra seca, como la sombra de una gran peña en tierra ardiente.
No hagáis como ellos, porque vuestro Padre conoce las necesidades que tenéis antes de que vosotros le pidáis'.
Sed fuertes y tened ánimo; no las temáis ni os asustéis, pues el Señor, tu Dios, va contigo; él no te dejará ni te abandonará'.
Samuel puso una piedra entre Mispá y Yesaná, y la llamó Ben Ezer, diciendo: 'Hasta aquí nos ha ayudado el Señor'.
Al maestro de coro. Salmo de David Que el Señor te escuche en el día de tu angustia, que te proteja el nombre del Dios de Jacob;
Ayúdame, Señor, Dios mío, líbrame, por tu misericordia. Que sepan que es tu mano, que eres tú, Señor, el que lo ha hecho.
Cuando estoy en peligro, tú me sacas con vida; das a mis enemigos un puñetazo en las narices y tu diestra me salva.
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