sin dejar de congregarnos, como algunos acostumbran, sino exhortémonos, y tanto más cuando ven que el día se acerca.
Yavé es mi Fortaleza y mi Escudo. Confió mi corazón en Él Y fui ayudado, Por lo cual se regocija mi corazón. Lo alabaré con mi canto.
Al que es poderoso para hacer todas las cosas infinitamente más allá de lo que nos atrevemos a pedir o entendemos, según el poder que actúa en nosotros,a Él sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús, por todas las generaciones del siglo de los siglos. Amén.
Vengan, adoremos y postrémonos. Arrodillémonos ante la Presencia de Yavé, nuestro Hacedor,
Pues mejor es un día en sus patios que 1.000 fuera de ellos. Prefiero estar en la puerta de la Casa de mi ʼElohim, Que vivir en las tiendas de perversidad.
Porque de Él, por medio de Él y en Él son todas las cosas. ¡A Él sea la gloria por los siglos! Amén.
Canten a ʼElohim. Canten salmos a su Nombre. Exalten al que cabalga sobre los cielos. YA es su Nombre. Regocíjense ante Él.Padre de huérfanos y Juez de viudas es ʼElohim en su Santuario,
¡Cuán maravillosas son tus moradas, oh Yavé de las huestes!Pues mejor es un día en sus patios que 1.000 fuera de ellos. Prefiero estar en la puerta de la Casa de mi ʼElohim, Que vivir en las tiendas de perversidad.Porque Sol y Escudo es Yavé ʼElohim, Gracia y gloria da Yavé. No retendrá el bien a los que andan en integridad.¡Oh Yavé de las huestes, cuán feliz es el hombre que confía en Ti!Mi alma anhela Y aun desea ardientemente los patios de Yavé. Mi corazón y mi carne cantan con gozo al ʼElohim vivo.Aun el pajarillo halla casa, Y la golondrina nido para ella donde colocar sus polluelos. Cerca de tus altares, oh Yavé de las huestes, Rey mío y ʼElohim mío.¡Inmensamente felices son los que moran en tu Casa! Perpetuamente te alaban. Selah
Oh Yavé, Tú eres mi ʼElohim. Te exaltaré. Alabaré tu Nombre, porque hiciste maravillas, tus designios antiguos, con perfecta fidelidad.
¿Por qué te abates, alma mía, y gimes dentro de mí? Espera a ʼElohim, porque aún lo alabaré. ¡Salvación mía y ʼElohim mío!
Los cielos cuentan la gloria de ʼElohim, Y el firmamento declara la obra de sus manos.Deseables son más que el oro, Más que mucho oro afinado, Y más dulces que la miel, Aun la que destila del panal.Tu esclavo es además amonestado por ellos. En guardarlos hay grande galardón.¿Quién reconocerá sus propios errores? Declárame inocente de los que me son ocultos.Aparta también a tu esclavo de las soberbias, Que no me dominen. Entonces seré íntegro Y declarado absuelto de gran transgresión.Sean aceptos los dichos de mi boca delante de Ti Y la meditación de mi corazón, Oh Yavé, Roca mía y Redentor mío.Día tras día pronuncian su mensaje, Y noche tras noche proclaman sabiduría.
Confío en tu misericordia, Y mi corazón se gozará en tu salvación.Cantaré a Yavé Porque me llenó de bienes.
De día Yavé enviará su misericordia, Y de noche su canto estará conmigo, Una oración al ʼEL de mi vida.
Entren por sus puertas con acción de gracias, Por sus patios con alabanza. Denle gracias, bendigan su Nombre,
Te exaltaré, mi ʼElohim, oh Rey, Y bendeciré tu Nombre eternamente y para siempre.Oh Yavé, todas tus obras te darán gracias, Y tus santos te bendecirán.Hablarán de la gloria de tu reino, Y conversarán sobre tu poder.Para proclamar a los hijos de hombres tus poderosas obras, Y la gloria de la majestad de tu reino.Tu reino es eterno, Y tu señorío por todas las generaciones.Yavé sostiene a todos los que caen Y levanta a todos los que están doblegados.Los ojos de todos miran a Ti. Y en su tiempo Tú les das su alimento.Abres tu mano Y sacias el deseo de todo ser viviente.Justo es Yavé en todos sus procedimientos, Y bondadoso en todas sus obras.Cerca está Yavé de todos los que lo invocan, De todos los que lo invocan en verdad.Cumplirá el deseo de los que le temen. Escuchará también su clamor, Y los salvará.Cada día te bendeciré y alabaré tu Nombre Eternamente y para siempre.Yavé guarda a todos los que lo aman, Pero destruirá a los perversos.Mi boca hablará la alabanza de Yavé, ¡Y todo ser viviente bendecirá su santo Nombre Eternamente y para siempre!Grande es Yavé, y digno de suprema alabanza, Y su grandeza es inescrutable.
Canten a ʼElohim. Canten salmos a su Nombre. Exalten al que cabalga sobre los cielos. YA es su Nombre. Regocíjense ante Él.
¡Tuya, oh Yavé, es la grandeza, el poder, la gloria, la victoria y el honor! ¡Porque todo cuanto existe en el cielo y en la tierra es tuyo! ¡Tuyo, oh Yavé, es el reino, y Tú te exaltas como soberano de todo!
Inmensamente feliz es aquél a quien Tú escoges Y acercas a Ti para que viva en tus patios. Seremos saciados con la abundancia de tu Casa, de tu santo Templo.
Los que confían en Yavé Son como la Montaña Sion, Que no se mueve, sino permanece para siempre.
Esfuércense y sean valientes. No teman, ni se aterroricen delante de ellos, porque Yavé tu ʼElohim es el que va contigo. No te dejará ni te desamparará.
YA es mi fortaleza y mi cántico, Y ha sido mi salvación. ¡Éste es mi ʼElohim y lo alabaré! ¡ʼElohim de mi padre, y lo exaltaré!
¡Aleluya! Alaben a Yavé desde los cielos. Alábenlo en las alturas.Los animales salvajes y todo ganado, Reptiles y ave alada,Reyes de la tierra y todos los pueblos, Magistrados y todos los jueces de la tierra,Tanto jóvenes varones como doncellas, Los ancianos y los niños,Alaben el Nombre de Yavé, Porque solo su Nombre es exaltado. Su gloria está por encima de la tierra y el cielo.Y Él levantó un poder para su pueblo, Alabanza para todos sus fieles, De los hijos de Israel, un pueblo cercano a Él. ¡Aleluya! ¡Aleluya!Alábenlo, todos sus ángeles. Alábenlo, todas sus huestes.Alábenlo, sol y luna. Alábenlo, todas lucientes estrellas.Alábenlo, los más altos cielos, Y las aguas que están sobre los cielos.Alaben el Nombre de Yavé, Porque Él mandó, Y fueron creados.
Por medio de Él ofrezcamos siempre a Dios sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesen su Nombre.
Pero ustedes son linaje escogido, sacerdocio real, nación santa, pueblo adquirido por Dios para que proclamen las virtudes del que los llamó de la oscuridad a su luz admirable,
¡Vengan, cantemos con gozo a Yavé! ¡Aclamemos con júbilo a la Roca de nuestra salvación!Durante 40 años estuve disgustado con aquella generación, Y dije: Es un pueblo que divaga en su corazón, Y no conoce mis caminos.Por tanto, juré en mi ira Que no entrarán en mi reposo.Entremos ante su Presencia con acción de gracias, Aclamémoslo con salmos.
¿Entonces, qué digo? Hablaré con Dios con el espíritu, pero también hablaré con el entendimiento. Cantaré alabanza con el espíritu, pero también cantaré con el entendimiento.
Yavé es mi Luz y mi Salvación, ¿De quién temeré? Yavé es la Fortaleza de mi vida, ¿De quién me aterrorizaré?
Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Quien nos bendijo con toda bendición espiritual en los planes celestiales con Cristo,
A toda criatura en el cielo, en la tierra, debajo de la tierra, en el mar y a todas las cosas que están en ellos, escuché que decían: ¡Alabanza, honra, gloria y soberanía al que está sentado En el trono, y al Cordero, por los siglos de los siglos!
Así nosotros, pueblo tuyo y ovejas de tu prado, Te daremos gracias para siempre. A todas las generaciones contaremos de tu alabanza.
La Palabra de Cristo viva abundantemente en ustedes, con toda sabiduría. Enséñense y amonéstense con salmos, himnos y cantos espirituales. Canten con gracia en sus corazones a Dios.
Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya fruto, Aunque falte el producto del olivo, Y los campos no produzcan alimento, Aunque se acaben las ovejas del redil Y no haya vacas en los establos,Sin embargo, yo me alegraré en Yavé Y me gozaré en el ʼElohim de mi salvación.
Sean aceptos los dichos de mi boca delante de Ti Y la meditación de mi corazón, Oh Yavé, Roca mía y Redentor mío.
Pero ahora, oh Jacob, Yavé, el que te creó, El que te formó, oh Israel, dice: No temas, porque Yo te redimí. Te di nombre. Mío eres tú.
Lavaré en inocencia mis manos, Y así andaré en torno a tu altar, oh Yavé,Para hacer resonar mi voz de gratitud Y contar todas tus maravillas.Oh Yavé, yo amo la Casa donde moras, Y el lugar donde reside tu gloria.
¿Está afligido alguno entre ustedes? Hable con Dios. ¿Está alguno alegre? Cante alabanza.
No a nosotros, oh Yavé, No a nosotros, Sino a tu Nombre da gloria, Por tu misericordia y por tu verdad.
El uno proclamaba al otro: ¡Santo, Santo, Santo, Yavé de las huestes! ¡Toda la tierra está llena de su gloria!
Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único Dios, sean el honor y la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Den gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para ustedes en Cristo Jesús.
Oh ʼElohim de nuestra salvación, ayúdanos, Para la gloria de tu Nombre. Líbranos y perdona nuestros pecados por amor a tu Nombre.
¡Aleluya! Alaben a ʼEL en su Santuario. Alábenlo en su esplendoroso firmamento.Alábenlo por sus poderosas obras. Alábenlo según su excelente grandeza.Alábenlo con el sonido de la trompeta. Alábenlo con arpa y lira.Alábenlo con pandero y danza. Alábenlo con instrumentos de cuerda y flautas.Alábenlo con címbalos resonantes. Alábenlo con címbalos de júbilo.¡Todo lo que respira alabe a Yavé! ¡Aleluya!
los trompetistas y los cantores se unieron para proclamar a una voz. Alababan y daban gracias a Yavé. Al alzar la voz con las trompetas, los címbalos y los otros instrumentos musicales, alababan a Yavé: Porque es bueno, porque para siempre es su misericordia, una nube llenó la Casa de Yavé.Los sacerdotes no pudieron continuar ministrando por causa de la nube, porque la gloria de Yavé llenó la Casa de ʼElohim.
Y dirán aquel día: Den gracias a Yavé. Invoquen su Nombre. Proclamen entre los pueblos sus proezas. Que reconozcan que su Nombre es excelso.
Pues en él se revela la justicia de Dios por fe y para fe, como está escrito: El justo vivirá por la fe.
Luego les dijo: ¡Vayan, coman manjares, beban bebidas dulces! ¡Envíen porciones al que nada tiene preparado, porque hoy es día santo para nuestro ʼAdonay! ¡No se entristezcan, porque el gozo de Yavé es su fortaleza!
¡Canten con júbilo a Yavé, gentes de toda la tierra!Sirvan a Yavé con alegría. Vengan ante Él con regocijo.Reconozcan que Yavé es ʼElohim. Él nos hizo y no nosotros mismos. Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.Entren por sus puertas con acción de gracias, Por sus patios con alabanza. Denle gracias, bendigan su Nombre,
Sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas ayudan para lo bueno, a los que son llamados según su propósito.
a fin de que vivan de una manera digna del Señor con el deseo de agradarlo en todo, den fruto en toda buena obra, crezcan en el conocimiento de Dios
Por tanto, como somos declarados justos por la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,
Por tanto, como somos declarados justos por la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,Porque si cuando éramos enemigos fuimos reconciliados con Dios por medio de la muerte de su Hijo, mucho más después de ser reconciliados seremos salvos por su vida.No solo esto, sino también celebramos a Dios a causa de nuestro Señor Jesucristo, por medio de Quien recibimos la reconciliación. Por esto, como el pecado entró en el mundo por medio de un hombre, y la muerte por medio del pecado, así también la muerte pasó a todos los hombres, porque todos pecaron.Pues antes de la Ley había pecado en el mundo, pero como no había Ley, no se tenía en cuenta el pecado.La muerte reinó desde Adán hasta Moisés, aun sobre los que no pecaron con una ofensa semejante a la transgresión de Adán, quien es figura del que vendría.Pero el Regalo no es como la transgresión. Porque si por la transgresión de uno, Adán, muchos murieron, mucho más abundó la gracia de Dios para muchos y el Regalo que vino por la gracia de un Hombre: Jesucristo.Con el Regalo no sucede como en el caso de aquel que pecó. Porque ciertamente el juicio vino a causa de un solo pecado para condenación, pero el Regalo vino a causa de muchas transgresiones para justificación.Porque si por la transgresión de uno reinó la muerte, mucho más reinarán en vida los que reciben la abundancia de la gracia y el Regalo de la justicia por medio de Uno, Jesucristo.Como por medio de la transgresión llegó la culpa a todos los hombres para condenación, así también, por medio de un acto de justicia llegó la gracia a todos los hombres para justificación de vida.Como por la desobediencia de un hombre muchos fueron declarados pecadores, así por la obediencia de Uno muchos serán declarados justos.por Quien también obtuvimos entrada a esta gracia en la cual estamos firmes, y celebramos la esperanza de la gloria de Dios.
Y dirán aquel día: Den gracias a Yavé. Invoquen su Nombre. Proclamen entre los pueblos sus proezas. Que reconozcan que su Nombre es excelso.¡Canten salmos a Yavé, porque hizo proezas! ¡Sea conocido esto en toda la tierra!¡Regocíjate y canta, oh habitante de Sion, porque el Santo de Israel es grande en medio de ti!
Den a Yavé la gloria debida a su Nombre. Traigan ofrenda y vengan delante de Él. Póstrense ante Yavé en la hermosura de la santidad.
Por tanto, hermanos, los exhorto por las misericordias de Dios a que presenten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, lo cual es su adoración racional.
para que en el Nombre de Jesús se doble toda rodilla, las celestiales, terrenales y subterráneas,y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor para la gloria de Dios Padre.
Oh ʼAdonay, ʼElohim mío, te alabaré con todo mi corazón. Glorificaré tu Nombre para siempre.
Porque Yavé es bueno. Para siempre es su misericordia, Y su fidelidad para todas las generaciones.
Por tanto, a Ti cantaré, Gloria mía, y no estaré callado. ¡Oh Yavé, mi ʼElohim, te daré gracias para siempre!
Vengan a Mí todos los que están agotados y cargados, y Yo los haré descansar.Lleven mi yugo sobre ustedes y aprendan de Mí, pues soy manso y humilde de corazón. Hallarán descanso para sus almas,¿Eres Tú el que venía o esperamos a otro?porque mi yugo es fácil y liviana mi carga.
Te daré gracias para siempre por lo que hiciste, Y esperaré en tu Nombre, Porque es bueno en presencia de tus devotos.
Cambiaste mi lamento en danza, Desataste mi tela áspera y me vestiste de alegría.Por tanto, a Ti cantaré, Gloria mía, y no estaré callado. ¡Oh Yavé, mi ʼElohim, te daré gracias para siempre!
El Dios de la esperanza los llene de todo gozo y paz en la fe, para que ustedes abunden en la esperanza por el poder del Espíritu Santo.
ʼElohim es nuestro Refugio y Fortaleza, Un auxilio muy presente en la tribulación.Estén quietos y reconozcan que Yo soy ʼElohim. Seré exaltado entre las naciones. Seré enaltecido en la tierra.Yavé de las huestes está con nosotros. Nuestra Fortaleza es el ʼElohim de Jacob. SelahPor tanto, no temeremos aunque la tierra sea removida, Y las montañas se traspasen al corazón del mar,Aunque bramen y espumen sus aguas, Y tiemblen las montañas a causa de su ímpetu. Selah
Aclame a ʼElohim, toda la tierra.Porque Tú nos probaste, oh ʼElohim. Nos purificaste en el crisol como se purifica la plata.Nos metiste en la red. Pusiste sobre nuestra cintura una carga muy pesada.Ordenaste que los hombres cabalgaran sobre nuestras cabezas. Pasamos por el fuego y por el agua. Pero luego nos sacaste a la abundancia.Entraré en tu Casa con holocaustos. Te pagaré mis votosQue pronunciaron mis labios, Que mi boca dijo cuando estaba angustiado.Te ofreceré holocaustos engordados con el humo de carneros. Te ofreceré becerros y machos cabríos. SelahVengan, escuchen todos los que temen a ʼElohim Y relataré lo que hizo por mi vida.A Él clamé con mi boca, Y Él fue exaltado con mi lengua.Si en mi corazón tuviera yo iniquidad ʼAdonay no me habría escuchado.Pero ciertamente ʼElohim me escuchó Y atendió la voz de mi súplica.Canten la gloria de su Nombre. Hagan gloriosa su alabanza.
Confía en Yavé con todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia inteligencia.Reconócelo en todos tus caminos, Y Él enderezará tus sendas.
Por cuanto recibimos un reino inconmovible, mostremos gratitud a Dios de manera aceptable con reverencia y temor,porque nuestro Dios es fuego consumidor.
Entonces iré al altar de ʼElohim, Al ʼEL de mi alegría y regocijo, Y te alabaré con el arpa, oh ʼElohim, mi ʼElohim.
¡Canten con júbilo a Yavé, gentes de toda la tierra!Sirvan a Yavé con alegría. Vengan ante Él con regocijo.
¡Estén siempre gozosos!Hablen con Dios sin cesar.Den gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para ustedes en Cristo Jesús.
pero los que esperan en Yavé tienen nuevas fuerzas. Levantarán las alas como águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.
Hablen con salmos, himnos y cánticos espirituales. Canten y entonen salmos al Señor con su corazón
Después de consultar con el pueblo, designó a algunos que cantaran y alabaran a Yavé, cubiertos con ropas sagradas, al frente del ejército, y dijeran: ¡Alaben a Yavé, porque para siempre es su misericordia!
Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad asentada sobre una montaña no se puede esconder.Tampoco encienden una lámpara para ponerla debajo de una caja, sino sobre el candelero, a fin de que alumbre a todos los que están en la casa.Así alumbre su luz delante de los hombres, de manera que vean sus buenas obras y glorifiquen a su Padre celestial.
Por tanto busquen primeramente el reino de Dios y la justicia de Él, y todas estas cosas se les añadirán.
En Ti confiarán los que conocen tu Nombre, Por cuanto Tú, oh Yavé, no abandonas a los que te buscan.
Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia para que obtengamos misericordia y hallemos gracia para la ayuda oportuna.
¡Oh profundidad de la riqueza, de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Cuán inalcanzables son sus juicios e inescrutables sus caminos!Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero?¿O quién le dio por adelantado para que Él le devuelva?Porque de Él, por medio de Él y en Él son todas las cosas. ¡A Él sea la gloria por los siglos! Amén.
¡Alégrense, oh justos, en Yavé, y regocíjense! ¡Canten con júbilo todos los rectos de corazón!
¡Aleluya! Inmensamente feliz es el hombre que teme a Yavé, Que grandemente se deleita en sus Mandamientos.
Perseveraban unánimes cada día en el Templo. Partían el pan de casa en casa y compartían alimento con alegría y sencillez de corazón.Alababan a Dios y tenían gracia con todo el pueblo. El Señor les añadía cada día los que eran salvos.
Porque el amor de Cristo nos obliga al pensar esto: que si Uno murió por todos, entonces todos murieron.Por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para ellos mismos, sino para Aquel que murió y fue resucitado por ellos.
Te doy gracias, Porque soy temerosa y maravillosamente formado. Maravillosas son tus obras, Y mi alma lo sabe muy bien.
No temas, porque Yo estoy contigo. No desmayes, porque Yo soy tu ʼElohim que te esfuerzo. Te ayudaré siempre. Te sostendré siempre con la mano derecha de mi justicia.
Bendice, alma mía, a Yavé, Y bendiga todo mi ser su santo Nombre.No nos trató según nuestras iniquidades, Ni nos retribuyó según nuestros pecados.Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, Engrandeció su misericordia hacia los que le temen.Tan lejos como está el oriente del occidente Removió de nosotros nuestras transgresiones.Como un padre tiene compasión de sus hijos, Así Yavé tiene compasión de los que le temen.Porque Él conoce nuestra condición. Se acuerda de que somos polvo.Como la hierba son los días del hombre. Florece como una flor del campo.Cuando el viento pasa sobre ella, ya no existe, Y su lugar ya no la reconoce.Pero la misericordia de Yavé es desde la eternidad Hasta la eternidad sobre los que le temen, Y su justicia sobre los hijos de los hijos,Sobre los que observan su Pacto Y recuerdan sus Preceptos para practicarlos.Yavé estableció en los cielos su trono, Y su reino domina sobre todo.Bendice, alma mía, a Yavé, Y no olvides ninguno de sus beneficios.
El Dios de la paciencia y la consolación les conceda el mismo sentir los unos hacia los otros, según Cristo Jesús,para que unánimes a una voz glorifiquen al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.
Una cosa le pedí a Yavé. Ésta buscaré: Que esté yo en la Casa de Yavé todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Yavé Y para meditar en su Templo.
¡Tuya, oh Yavé, es la grandeza, el poder, la gloria, la victoria y el honor! ¡Porque todo cuanto existe en el cielo y en la tierra es tuyo! ¡Tuyo, oh Yavé, es el reino, y Tú te exaltas como soberano de todo!De Ti procede la riqueza y la honra. Tú gobiernas todo. En tu mano está el poder y la fortaleza. En tu mano está la facultad de engrandecer y fortalecer a todos.Ahora pues, oh ʼElohim nuestro, nosotros alabamos y loamos tu glorioso Nombre.
En cuanto a mí, la cercanía de ʼElohim es mi dicha. En ʼAdonay Yavé está mi refugio, Para que cuente todas tus obras.
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