Amado nuestro, en todo hago oración por tí, para que prosperes y tengas buena salud, así como prospera tu alma,
porque somos creación suya, creados por medio de Jesucristo para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas.
Que el Dios de la esperanza los colme de todo gozo y paz en la fe, para que crezcan en su esperanza por el poder del espíritu santo.
porque estoy convencido de esto: que Aquel que inició en ustedes las buenas obras, las perfeccionará hasta el día de nuestro Señor Jesucristo.
Y AMARÁS A YAHWEH TU DIOS, CON TODO TU CORAZÓN, CON TODA TU ALMA, CON TODA TU MENTE Y CON TODAS TUS FUERZAS'. Este es el mandamiento más grande.
Pero los frutos del espíritu son: amor, gozo, paz, paciencia, afabilidad, bondad, confianza, humildad, dominio de sí mismo. Contra tales cosas no hay ley,
De modo que todo el que está en el Cristo, es nueva criatura; las cosas viejas pasaron
Y todo lo que hagan, háganlo con toda su alma, como para nuestro Señor y no como para los hombres, entendiendo que de nuestro Señor recibirán la recompensa en la herencia, porque ustedes sirven al Señor, el Cristo.
y no sean conforme a este mundo, sino transfórmense por medio de la renovación de su mente, y disciernan cuál es la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios.
Según el don que cada uno recibió de Dios, sirva con él a sus compañeros como buenos administradores de la gracia multiforme de Dios.
Considerémonos, pues, unos a otros, para estimularnos al amor y a las buenas obras, y no dejemos de congregarnos[4] como algunos tienen por costumbre, sino intercedamos unos por otros, con mayor razón cuando vemos que aquel día se acerca,
Y a Aquel que es capaz por su gran poder de hacer por nosotros mucho más de lo que pedimos o pensamos, conforme a su poder que opera en nosotros,
Y nosotros sabemos que a los que aman a Dios, Él los ayuda en todo para bien, a los que designó anticipadamente para que fueran llamados,
Por tanto, tal como han recibido a Jesucristo nuestro Señor, así condúzcanse en Él, afirmando sus raíces y siendo edificados en Él, establecidos en la fe que han aprendido y abundado en ella con acción de gracias.
Estén siempre gozosos. Oren sin desistir. Den gracias en todo, porque ésta es la voluntad de Dios para ustedes en Jesucristo.
Regocíjense siempre en nuestro Señor. De nuevo les digo: ¡Regocíjense! Su humildad sea conocida por todo hombre. Nuestro Señor está cerca. Por nada estén ansiosos, sino sean conocidas siempre sus peticiones delante de Dios en oración y súplicas y con acción de gracias, y la paz de Dios, que excede a todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Jesucristo.
Únete al canal de BibliaTodo en tu app favorita: