pero los que esperan en Yavé tienen nuevas fuerzas. Levantarán las alas como águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.
En tu mano están mis tiempos. Líbrame de la mano de mis enemigos y de mis perseguidores.
Porque aún es visión para el tiempo señalado. Ella se apresura hacia la meta y no fallará. Aunque demore, espérala, porque ciertamente vendrá y no tardará.
Porque mis pensamientos no son sus pensamientos, ni sus caminos, mis caminos, dice Yavé.Porque como los cielos son más altos que la tierra, así mis caminos son más altos que sus caminos, y mis pensamientos más que sus pensamientos.
Porque Yo sé los designios que tengo para ustedes, dice Yavé, designios de bienestar y no de mal, a fin de darles porvenir y esperanza.
Sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas ayudan para lo bueno, a los que son llamados según su propósito.
Confía en Yavé con todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia inteligencia.Reconócelo en todos tus caminos, Y Él enderezará tus sendas.
Guarda silencio ante Yavé, Y espéralo con paciencia. No te impacientes a causa del que prospera en su camino, A causa del hombre que maquina perversidades.
Amados, no ignoren ustedes que para el Señor un día es como 1.000 años, y 1.000 años como un día.El Señor no retarda lo que prometió, como algunos lo tienen por tardanza, sino es longánime hacia ustedes. No quiere que algunos se pierdan, sino que todos cambien de mente.
Estén quietos y reconozcan que Yo soy ʼElohim. Seré exaltado entre las naciones. Seré enaltecido en la tierra.
Por tanto, Yavé espera para otorgarles gracia. Por eso se levanta para compadecerse de ustedes, porque Yavé es ʼElohim justo. ¡Inmensamente felices todos los que esperan en Él!
Porque es necesaria la paciencia, para que, después de hacer la voluntad de Dios, obtengan la promesa.
Nuestras almas esperan a Yavé. Él es nuestra Ayuda y nuestro Escudo.Por tanto, en Él se alegra nuestro corazón, Porque confiamos en su santo Nombre.Que tu misericordia, oh Yavé, sea sobre nosotros, Según esperamos en Ti.
Por tanto, humíllense bajo la poderosa mano de Dios para que los exalte cuando sea tiempo.Echen toda su ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de ustedes.
Regocíjense en la esperanza, permanezcan firmes en la aflicción, persistan en la conversación con Dios,
Por nada estén ansiosos, sino sean conocidas sus peticiones ante Dios, en toda conversación con Dios y súplica, con acción de gracias.La paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
Encamíname en tu verdad y enséñame, Porque Tú eres el ʼElohim de mi salvación. En Ti espero todo el día.
Espero a Yavé. Mi alma espera. En tu Palabra fijo mi esperanza.Más que los centinelas a la mañana, Mi alma espera a ʼAdonay. ¡Sí, más que los centinelas la mañana!
Bueno es Yavé para los que lo esperan, Para el alma que lo busca.Bueno es esperar en silencio La salvación de Yavé.
Porque 1.000 años delante de tus ojos son como el día de ayer que pasó, O como una de las vigilias de la noche.
Yavé dice: Te respondí en tiempo favorable. Te ayudé en el día de salvación. Te guardaré y te daré como Pacto al pueblo para que restaures la tierra con el propósito de que posean las heredades desoladas,
Aunque ande por el valle de la sombra de muerte, No temeré algún mal, Porque Tú estás conmigo. Tu vara y tu cayado me confortan.
Entonces Sara concibió, y según el tiempo señalado que ʼElohim le indicó, dio a luz un hijo a Abraham en su vejez.
El Dios de la esperanza los llene de todo gozo y paz en la fe, para que ustedes abunden en la esperanza por el poder del Espíritu Santo.
Hubiera yo desmayado Si no creyera que veré la bondad de Yavé en la tierra de los vivientes.Espera a Yavé. ¡Sé fortalecido y aliéntese tu corazón! ¡Sí, espera a Yavé!
Por tanto, hermanos, tengan paciencia hasta la venida del Señor. Observen cómo el labrador espera con paciencia el precioso fruto de la tierra hasta que llegue la lluvia temprana y tardía.Sean pacientes. Fortalezcan sus corazones, porque la venida del Señor está cerca.
Mejor es refugiarse en Yavé Que confiar en hombre.Mejor es refugiarse en Yavé Que confiar en los poderosos.
Por tanto busquen primeramente el reino de Dios y la justicia de Él, y todas estas cosas se les añadirán.
Ésta es la confianza que tenemos ante Él: Que cuando pidamos algo conforme a su voluntad, nos escucha.
Pero sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que existe y que es Galardonador de los que lo buscan.
Porque Sol y Escudo es Yavé ʼElohim, Gracia y gloria da Yavé. No retendrá el bien a los que andan en integridad.
Sin embargo, nadie sabe en cuanto a aquél día y hora, ni los ángeles de los cielos, ni el Hijo. Solo el Padre.
El amor es paciente. Es bondadoso. No está lleno de envidia. No se alaba, no es arrogante,
Les he dicho esto para que en Mí tengan paz. En el mundo tienen aflicción, pero ¡tengan ánimo! Yo he vencido al mundo.
Oh pueblo, confíen en Él en todo tiempo. Derramen su corazón ante Él. ʼElohim es nuestro Refugio. Selah
¿Hay algo imposible para Yavé? Volveré a ti según el tiempo de la vida, y Sara tendrá un hijo.
No sean moldeados por este mundo, sino sean transformados por la renovación de la mente, para que comprueben la voluntad de Dios, la cual es buena, aceptable y perfecta.
Jamás oído oyó ni ojo vio a un ʼelohim fuera de Ti, que actúa a favor del que espera en Él.
Yavé es mi Luz y mi Salvación, ¿De quién temeré? Yavé es la Fortaleza de mi vida, ¿De quién me aterrorizaré?
Sean sus costumbres sin avaricia. Estén satisfechos con lo que tienen, porque Él mismo dijo: Que de ningún modo te abandone. Que de ningún modo te desampare.De manera que decimos confiadamente: El Señor es mi Ayudador, no temeré. ¿Qué podrá hacerme un ser humano?
Oh ʼElohim, Tú eres mi ʼEL. Ansiosamente te busqué. Mi alma tiene sed de Ti. Mi cuerpo te anhela en tierra árida y deshabitada, Donde no hay agua.
Por tanto los que padecen según la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador y hagan lo bueno.
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento persevera en ti, porque en Ti confió.
Me convencí de que El que inició en ustedes la buena obra la completará hasta el día de Jesucristo.
Sucedió que Ana concibió, y al cumplirse el tiempo, dio a luz un hijo. Lo llamó Samuel y dijo: Porque lo pedí a Yavé.
Paz les dejo. Les doy mi paz. Yo no se la doy como el mundo la da. No se atribule ni se atemorice su corazón.
¡Oh profundidad de la riqueza, de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Cuán inalcanzables son sus juicios e inescrutables sus caminos!
Muchos designios hay en el corazón del hombre, Pero el propósito de Yavé es el que prevalece.
Esto es un gran gozo para ustedes, aunque ahora, si es necesario, por poco tiempo sean afligidos con diversas pruebas.La fe es más preciosa que el oro, el cual, aunque perecedero, se prueba con fuego. La prueba de su fe debe resultar en alabanza, gloria y honra en la aparición de Jesucristo,
Cuando pases por las aguas Yo estaré contigo. La corriente no te anegará. Cuando andes por el fuego no te quemarás, ni la llama arderá en ti.
El camino de ʼElohim es perfecto. La Palabra de Yavé, acrisolada. Él es escudo a todos los que se refugian en Él.
Bendito el que confía en Yavé, cuyo fundamento está en Yavé.Será como árbol plantado junto a las aguas, que extiende sus raíces hacia las corrientes. No teme cuando viene el calor, pues su follaje estará frondoso. El año de sequía no se afanará, ni dejará de dar su fruto.
Si permanecen en Mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que deseen y se les hará.
Al que es poderoso para hacer todas las cosas infinitamente más allá de lo que nos atrevemos a pedir o entendemos, según el poder que actúa en nosotros,a Él sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús, por todas las generaciones del siglo de los siglos. Amén.
la cual mostrará en tiempos apropiados el bendito y único Soberano, el Rey de reyes y Señor de señores,
Te haré entender Y te enseñaré el camino en el cual debes andar. Sobre Ti fijaré mis ojos y te aconsejaré.
Se seca la hierba, se marchita la flor, pero la Palabra del ʼElohim nuestro permanece para siempre.
Vengan a Mí todos los que están agotados y cargados, y Yo los haré descansar.Lleven mi yugo sobre ustedes y aprendan de Mí, pues soy manso y humilde de corazón. Hallarán descanso para sus almas,¿Eres Tú el que venía o esperamos a otro?porque mi yugo es fácil y liviana mi carga.
Porque Yavé es bueno. Para siempre es su misericordia, Y su fidelidad para todas las generaciones.
Por tanto, no desfallecemos. Más bien, aunque nuestro aspecto exterior es desgastado, sin embargo, el interior es renovado de día en día.Porque esta leve aflicción momentánea se nos reproduce en un peso eterno de resplandor de extraordinaria calidad,al nosotros no mirar las cosas que se ven, sino las que no se ven. Porque las que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.
Pero ustedes son linaje escogido, sacerdocio real, nación santa, pueblo adquirido por Dios para que proclamen las virtudes del que los llamó de la oscuridad a su luz admirable,
también obtuvimos herencia, fuimos predestinados, escogidos conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad,
No temas, porque Yo estoy contigo. No desmayes, porque Yo soy tu ʼElohim que te esfuerzo. Te ayudaré siempre. Te sostendré siempre con la mano derecha de mi justicia.
Encomienda a Yavé tu camino, Confía en Él, Y Él hará.Exhibirá tu justicia como la luz, Y tu derecho como el mediodía.
Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad. Átalas a tu cuello. Escríbelas en la tabla de tu corazón,No tengas pleito con alguno sin causa, Si no te hizo agravio.No envidies al hombre violento, Ni escojas alguno de sus caminos,Porque Yavé aborrece al perverso. Su íntima comunión es con los rectos.La maldición de Yavé está sobre la casa del impío, Pero bendice la morada de los justos.Ciertamente Él se burla de los que se burlan Y da gracia a los humildes.Los sabios heredarán honra, Pero los necios cargarán la afrenta.Y hallarás gracia y buena opinión Ante los ojos de ʼElohim y del hombre.
Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia para que obtengamos misericordia y hallemos gracia para la ayuda oportuna.
Ciertamente ʼEL es mi salvación. Confiaré y no temeré, porque mi fortaleza y mi cántico es YA Yavé, quien es mi salvación.
Cerca está Yavé de todos los que lo invocan, De todos los que lo invocan en verdad.Cumplirá el deseo de los que le temen. Escuchará también su clamor, Y los salvará.
Yo soy la Vid, ustedes las ramas. El que permanece en Mí, y Yo en él, éste da mucho fruto. Porque separados de Mí nada pueden hacer.
Yavé es mi Fortaleza y mi Escudo. Confió mi corazón en Él Y fui ayudado, Por lo cual se regocija mi corazón. Lo alabaré con mi canto.
Pero en todas estas cosas ganamos la más gloriosa victoria por medio de Aquel que nos amó.Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni gobernantes, ni lo presente, ni lo que viene, ni poderes,ni lo alto, ni lo profundo, ni otra criatura podrá separarnos del amor de Dios, que es en Cristo Jesús, nuestro Señor.
Porque Dios no nos dio espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
No solo esto, sino también celebramos las aflicciones, pues sabemos que la aflicción produce paciencia,y la paciencia, carácter aprobado, y el carácter aprobado, esperanza.
Sostengamos firme la confesión de nuestra esperanza sin fluctuar, porque el que prometió es fiel.
No saldrán apresurados ni se irán huyendo, porque delante de ustedes irá Yavé, y en la retaguardia el ʼElohim de Israel.
En Ti confiarán los que conocen tu Nombre, Por cuanto Tú, oh Yavé, no abandonas a los que te buscan.
Oh ʼAdonay Yavé, en verdad Tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder y con tu brazo extendido. Nada es imposible para Ti.
Nosotros conocemos y creemos el amor que Dios tiene en nosotros. Dios es amor, y el que permanece en el amor, permanece en Dios, y Dios permanece en él.
Jesús les respondió: Yo soy el Pan de la Vida. El que viene a Mí, que de ningún modo tenga hambre, y el que cree en Mí, que de ningún modo tenga sed jamás.
Porque en esperanza fuimos salvos, pero la esperanza que se ve no es esperanza, porque ¿qué espera el que ve?Pero si esperamos lo que no vemos, pacientemente esperamos con anhelo.
Oh Yavé, Tú eres mi ʼElohim. Te exaltaré. Alabaré tu Nombre, porque hiciste maravillas, tus designios antiguos, con perfecta fidelidad.
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de arriba, del Padre de las luces, en Quien no hay cambio ni sombra de variación.
Aun antes que hubiera día, Yo Soy. No hay quien libre de mi mano. Lo que Yo hago, ¿quién puede revertirlo?
El más pequeño equivaldrá a 1.000, y el menor a una nación poderosa. Yo, Yavé, apresuraré esto en su tiempo.
El Dios de toda gracia, Quien los llamó a su gloria eterna en Cristo, después que padezcan un poco, Él mismo los perfeccionará, confirmará, fortalecerá y establecerá.
Antes que nacieran las montañas, O formaras la tierra y el mundo, Desde la eternidad y hasta la eternidad, Tú eres ʼEL.
Pero Dios demuestra su amor hacia nosotros, porque cuando éramos aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Yavé hará lo que concierne a mí. Oh Yavé, tu misericordia es para siempre, No desampares la obra de tus manos.
Porque ʼAdonay Yavé, el Santo de Israel, dice: En regresar a Mí y tener calma, serán salvos. En quietud y confianza está su fortaleza. Pero no quisieron.
Jesús le contestó: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie viene al Padre sino por medio de Mí.
Ordenaste que los hombres cabalgaran sobre nuestras cabezas. Pasamos por el fuego y por el agua. Pero luego nos sacaste a la abundancia.
Dijo: ¡Te amo, oh Yavé, Fortaleza mía!Cabalgó sobre un querubín y voló. Se precipitó sobre las alas del viento.Puso oscuridad como escondedero Con su Tabernáculo alrededor de Él, Oscuridad de agua, Densas nubes bajo el cielo.El fulgor de su Presencia Atravesó las densas nubes. Descargó granizo y carbones encendidos.Yavé tronó desde el cielo. ʼElyón dio su voz: ¡Granizo y carbones encendidos!Disparó sus flechas y los dispersó. Relámpagos en abundancia, y los confundió.Entonces aparecieron los lechos del agua Y se descubrieron los cimientos del mundo Ante tu bramido, oh Yavé, Por el soplo del aliento de tu nariz.Envió desde lo alto y me tomó, Me sacó de muchas aguas.Me libró de mi poderoso enemigo Y de los que me aborrecían, Porque eran más fuertes que yo.Me enfrentaron en el día de mi calamidad, Pero Yavé fue mi apoyo.Me sacó a un lugar espacioso. Me rescató, porque se complació en mí.¡Yavé, Roca mía y Castillo mío, y mi Libertador! ʼElohim mío y Fortaleza mía, en Quien me refugio, Mi Escudo y mi Cuerno de salvación, mi alta Torre.
Porque lo que se escribió fue para enseñarnos, a fin de que tengamos esperanza por la paciencia y la consolación de las Escrituras.
Pero Tú, ʼAdonay, eres un ʼEL misericordioso y compasivo, Lento para la ira y grande en misericordia y verdad.
por medio de las cuales se nos regalaron grandísimas y preciosas promesas, a fin de que por medio de ellas seamos participantes de la naturaleza divina y escapemos de la depravación del mundo.
¿Por qué te abates, alma mía, y gimes dentro de mí? Espera a ʼElohim, porque aún lo alabaré. ¡Salvación mía y ʼElohim mío!
el cual tenemos como ancla firme y segura del alma, y que entra hasta lo que está en el interior del velo,
YA es mi fortaleza y mi cántico, Y ha sido mi salvación. ¡Éste es mi ʼElohim y lo alabaré! ¡ʼElohim de mi padre, y lo exaltaré!
ʼElohim está en medio de ella. No será conmovida. ʼElohim la ayudará al clarear la mañana.
Porque Él me esconderá en su Tabernáculo en el día del mal. Me ocultará en lo reservado de su Tabernáculo. Me pondrá en alto sobre una roca.
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