31 Versículos de la Biblia sobre la Bendición de Dios

Y Dios los bendijo, diciéndoles: "Fructificad y multiplicaos, llenad la tierra y sometedla, y dominad sobre los peces del mar, las aves del cielo y todas las bestias que se mueven sobre la tierra." Génesis 1:28

Cuando Dios creó al ser humano y le reveló su propósito en la Tierra, incluyó su bendición. No solo es importante alcanzar y recibir la bendición de Dios en la vida, sino también es crucial cómo la administramos. En la bendición de Cristo, tú y yo somos benditos, porque Dios ha decidido bendecirnos con toda bendición. No nos ha bendecido por ser buenos, ni por nuestros propios méritos, sino porque nos amó en Él desde antes de la fundación del mundo, y nos llamó con un llamamiento santo. A partir de esta premisa, guarda en tu corazón la palabra de Dios, y así su bendición te seguirá a todas partes, porque desde la eternidad, el Padre determinó bendecirte en su corazón.

Ya que Jehová tu Dios te habrá bendecido, como te ha dicho, prestarás entonces a muchas naciones, mas tú no tomarás prestado; tendrás dominio sobre muchas naciones, pero sobre ti no tendrán dominio.

Te dé conforme al deseo de tu corazón, Y cumpla todo tu consejo.

Mas a Jehová vuestro Dios serviréis, y él bendecirá tu pan y tus aguas; y yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti.

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,

Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;

Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.

Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará.

La bendición de Jehová es la que enriquece, Y no añade tristeza con ella.

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Jehová te bendiga, y te guarde;

Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia;

Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz.

Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.

Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová.

Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto.

Y bendijo Jehová el postrer estado de Job más que el primero; porque tuvo catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas,

Bendecirá a los que temen a Jehová, A pequeños y a grandes.

El entendido en la palabra hallará el bien, Y el que confía en Jehová es bienaventurado.

Encomienda a Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados.

Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.

Si anduviereis en mis decretos y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra,

yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra rendirá sus productos, y el árbol del campo dará su fruto.

Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.

La salvación es de Jehová; Sobre tu pueblo sea tu bendición. Selah

Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.

Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.

para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios.

Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.

¡Quién diera que tuviesen tal corazón, que me temiesen y guardasen todos los días todos mis mandamientos, para que a ellos y a sus hijos les fuese bien para siempre!

y ahora has querido bendecir la casa de tu siervo, para que permanezca perpetuamente delante de ti; porque tú, Jehová, la has bendecido, y será bendita para siempre.

Y daré bendición a ellas y a los alrededores de mi collado, y haré descender la lluvia en su tiempo; lluvias de bendición serán.

Jehová es mi pastor; nada me faltará.

En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará.

porque yo te mando hoy que ames a Jehová tu Dios, que andes en sus caminos, y guardes sus mandamientos, sus estatutos y sus decretos, para que vivas y seas multiplicado, y Jehová tu Dios te bendiga en la tierra a la cual entras para tomar posesión de ella.

Y estuvo el arca de Jehová en casa de Obed-edom geteo tres meses; y bendijo Jehová a Obed-edom y a toda su casa.

Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó.

Y dijo: Déjame, porque raya el alba. Y Jacob le respondió: No te dejaré, si no me bendices.

Oración

¡Dios bueno y eterno, Altísimo Señor! Te alabo porque eres Justo, Santo y digno de toda alabanza y adoración. Hoy estoy delante de ti dándote gracias por la bendición de ser tu hijo. Te pido, que tú presencia permanezca en mi vida y en mi hogar, así como bendijiste la vida de Obed-edom y la de su familia. Gracias porque me has bendecido de manera especial, trayendo sanidad, provisión y protección a mi vida. Me has bendecido colocando en mi camino personas correctas, en el momento correcto. Porque tú me has hecho más que vencedor en cada una de mis batallas, entregándome la victoria, por eso y por mucho más, a ti daré toda la gloria y la honra. En el nombre de Jesús. ¡Amén!