Y tanto los que iban delante como los que iban detrás, decían aclamándole: ¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!
y cuando ya estaban cerca de la bajada del monte de los Olivos, la comitiva prorrumpió en gritos y cantos de alabanza a Dios por las maravillas que habían visto realizar a Jesús. Decían:
Con la ayuda del Señor continuemos ofreciéndole el mejor de todos los sacrificios de alabanza, que consiste en anunciar a otros la gloria del nombre de Jesús.
y del trono salió una voz, diciendo:'¡Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y todos los que le reverenciáis, pequeños y grandes!'
En cuanto a los pastores, se volvieron al campo y a su rebaño alabando a Dios por la visita de los ángeles y porque habían visto al niño, tal como se les había dicho. Presentación de Jesús en el templo
Simeón lo tomó en brazos y alabó a Dios, diciendo: Ahora, Señor, puedo ya morir en paz, pues, conforme a tu promesa, he visto con mis propios ojos al Salvador
Después de haberle adorado, los discípulos se volvieron a Jerusalén llenos de alegría; y desde entonces estaban siempre en el templo, alabando y bendiciendo a Dios.
A medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, mientras todos los presos les escuchaban. De pronto, un terremoto hizo temblar los cimientos de la cárcel; fue tan violenta la sacudida, que las puertas se abrieron y las cadenas de los presos saltaron hechas pedazos.
Que la palabra de Cristo rebose en vosotros de tal manera que unos a otros seáis capaces de instruiros y animaros con sabiduría, y que, llenos de gratitud vuestros corazones, cantéis al Señor salmos, himnos y cánticos espirituales,
y le dijeron: ¿No oyes lo que están gritando esos niños?Él les respondió: Sí, los oigo. ¿Pero no habéis leído vosotros que 'De la boca de los niños, de los recién nacidos, hiciste perfecta la alabanza'?
En su canto proclamaban a gran voz: '¡El Cordero que fue sacrificado es dignode recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la fortaleza, el honor, la gloria y la alabanza!'
Vosotros, en cambio, sois un linaje escogido, un real sacerdocio, una nación santa, un pueblo que Dios ha adquirido para que anunciéis a otros las grandezas de aquel que, estando vosotros en tinieblas, os llamó a participar de su luz maravillosa.
Únete al canal de BibliaTodo en tu app favorita: