Cantares 7:7 - La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ Tu talle se asemeja a la palmera, Y tus pechos, a sus racimos.

Higit pang mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

⁷ Tu estatura es semejante a la palmera, Y tus pechos a los racimos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Eres esbelta como una palmera y tus pechos son como los racimos de su fruto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ ¡Qué bella eres, qué encantadora, oh amor, en tus delicias!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ ¡Qué bella y qué agraciada! ¡Qué delicioso tu amor!

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁷ Tu estatura es semejante a la palmera, y tus pechos como racimos de uvas.

Cantares 7:7 Mga Krus na Reperensya

Cantares 4:5

Tus dos pechos, como crías mellizas de gacela, Que apacientan entre lirios.

Efesios 4:13

hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno° del Hijo de Dios, a un varón perfecto,° a la medida de la estatura de la plenitud del Mesías.

Efesios 3:17

para que habite el Mesías por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,

Isaías 66:10

¡Alegraos con Jerusalem, gozaos con ella todos los que la amáis! ¡Rebosad de júbilo con ella, los que por ella llevasteis luto!

Cantares 1:13

Mi amado es para mí un manojito de mirra, Que reposa entre mis pechos.

Salmos 92:12

El justo florecerá como la palmera, Crecerá como cedro en el Líbano,

Cantares 8:8

Ella Tenemos una hermana pequeña, Que aún no tiene pechos. ¿Qué haremos por nuestra hermana En el día en que sea pedida?°

Cantares 7:8

Alguien Dije: Subiré a la palmera, Tomaré sus frutos: Sean tus pechos como racimos de la vid, Y la fragancia de tu aliento como de manzanas,

Cantares 7:3

Tus dos pechos, como crías mellizas de gacela.

Jeremías 10:5

Son° como poste en un pepinar:° No hablan, Y ciertamente tienen que ser cargados, Porque no pueden andar. No tengáis temor de ellos, Porque ni pueden hacer mal, Ni para hacer bien tienen poder.

Cantares 7:6

¡Cuán hermosa y dulce eres, Oh amor deleitoso!

Cantares 1:15

Él He aquí eres hermosa, oh amada mía. ¡Cuán bella eres! Tus ojos son como palomas.