y serás bienaventurado, pues no te pueden retribuir, pero te será recompensado en la resurrección de los justos.
Apocalipsis 20:5 - La Biblia Textual 3a Edicion pero los demás muertos no volvieron a vivir° hasta que fueron cumplidos los mil años. Higit pang mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección. Biblia Nueva Traducción Viviente Esta es la primera resurrección. (El resto de los muertos no volvieron a la vida hasta que se cumplieron los mil años). Biblia Católica (Latinoamericana) Esta es la primera resurrección. El resto de los muertos no volvieron a la vida hasta que se cumplieron los mil años. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los demás muertos no volvieron a la vida hasta cumplidos los mil años. Ésta es la primera resurrección. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Ellos son los primeros que volverán a vivir; pues han recibido una gran bendición y forman parte del pueblo elegido de Dios. Nunca serán apartados de Dios, sino que serán sacerdotes de Dios y del Mesías, y reinarán con él durante mil años. El resto de los muertos no volverá a vivir hasta que se cumplan los mil años. |
y serás bienaventurado, pues no te pueden retribuir, pero te será recompensado en la resurrección de los justos.
Porque si su exclusión es la reconciliación del mundo, ¿qué será su readmisión, sino vida entre los muertos?
si en alguna manera llegara a la resurrección de entre los muertos.°
Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo, y los muertos en el Mesías resucitarán primero.
Pero después de los tres días y medio, entró en ellos un aliento de vida procedente de Dios,° y se pusieron sobre sus pies,° y un gran temor cayó sobre quienes los contemplaban.
Y el séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: ¡El reino del mundo ha llegado a ser de nuestro Señor y de su Ungido, y reinará por los siglos de los siglos!°