Marcos 15:43 - La Biblia Textual 3a Edicion vino José de Arimatea, un miembro respetable del Sanedrín, el cual también esperaba el reino de Dios, y entró osadamente° ante Pilato y pidió el cuerpo de Jesús. Matoleo zaidiBiblia Reina Valera 1960 José de Arimatea, miembro noble del concilio, que también esperaba el reino de Dios, vino y entró osadamente a Pilato, y pidió el cuerpo de Jesús. Biblia Nueva Traducción Viviente José de Arimatea se arriesgó y fue a ver a Pilato y pidió el cuerpo de Jesús. (José era miembro honorable del Concilio Supremo y esperaba la venida del reino de Dios). Biblia Católica (Latinoamericana) intervino José de Arimatea. Ese miembro respetable del Consejo supremo era de los que esperaban el Reino de Dios, y fue directamente donde Pilato para pedirle el cuerpo de Jesús. Biblia Serafín de Ausejo 1975 José de Arimatea, miembro ilustre del sanedrín, el cual también esperaba el reino de Dios, se fue resueltamente ante Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús. Biblia Reina Valera Gómez (2023) José de Arimatea, consejero honorable, que también esperaba el reino de Dios, vino, y entró osadamente a Pilato, y pidió el cuerpo de Jesús. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Un hombre llamado José, del pueblo de Arimatea, no tuvo miedo de pedirle a Pilato el cuerpo de Jesús. José era un miembro muy importante de la Junta Suprema. Además, él oraba para que el reinado de Dios empezara pronto. |
Llegado el atardecer, vino un hombre rico de Arimatea, de nombre José, el cual también se había hecho discípulo de Jesús.
Y Pedro lo siguió de lejos, hasta dentro del patio del sumo sacerdote, y estaba sentado con los criados calentándose al fuego.
Pilato se sorprendió de que ya hubiera° muerto, y llamando al centurión le preguntó si ya había muerto.°
Y he aquí había en Jerusalem un hombre cuyo nombre era Simeón. Y este hombre justo y devoto esperaba la liberación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él.
También ésta, presentándose en la misma hora, daba gracias a Dios, y hablaba acerca de Él° a todos los que esperaban la liberación de Jerusalem.
Y he aquí un hombre llamado José, de Arimatea, ciudad de los judíos, varón bueno y justo, el cual esperaba el reino de Dios, y que era del concilio,°
Después de estas cosas, José de Arimatea, que era° discípulo de Jesús (aunque en secreto por temor a los judíos), rogó a Pilato que le permitiera llevar° el cuerpo de Jesús. Pilato se lo permitió, y entonces fue y llevó su cuerpo.
Pero los judíos soliviantaron a distinguidas mujeres adoradoras de Dios, y a líderes de la ciudad, y provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé, y los echaron de sus territorios.
Por tanto, muchos de ellos creyeron, así como algunas prominentes mujeres griegas, y no pocos varones.
Y la mayoría de los hermanos en el Señor, cobrando ánimo con mis prisiones,° se atreven a hablar con denuedo la Palabra sin temor.°