José también almacenó grano como la arena del mar, mucho en extremo, hasta que dejó de contarlo, pues era sin número.
1 Reyes 4:29 - La Biblia Textual 3a Edicion Y ’Elohim dio a Salomón sabiduría, gran entendimiento y amplitud de corazón, como la arena que está a la orilla del mar. Matoleo zaidiBiblia Reina Valera 1960 Y Dios dio a Salomón sabiduría y prudencia muy grandes, y anchura de corazón como la arena que está a la orilla del mar. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios le dio a Salomón muchísima sabiduría y gran entendimiento, y un conocimiento tan vasto como la arena a la orilla del mar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Dios dio a Salomón sabiduría y entendimiento muy grande, y grandeza de corazón, como la arena que está a la orilla del mar. Biblia Traducción en Lenguaje Actual 29 (5.9) Dios le dio a Salomón sabiduría, inteligencia y gran capacidad para comprenderlo todo. |
José también almacenó grano como la arena del mar, mucho en extremo, hasta que dejó de contarlo, pues era sin número.
he aquí cumplo tu ruego y te doy un corazón sabio y entendido, tal que no ha habido otro antes de ti, ni lo habrá después de ti.°
Y todo Israel se enteró de la sentencia que había dado el rey, y tuvieron temor al rey, porque vieron que la sabiduría de Dios estaba en su corazón para hacer justicia.
Judá e Israel eran tan numerosos como la arena que está junto al mar en multitud; y comían, bebían y se regocijaban.
Correré por el camino de tus mandamientos, Porque Tú habrás ensanchado mi corazón.
Porque YHVH da la sabiduría, De su boca procede la ciencia y la inteligencia.
Hablé con mi corazón diciéndole: Mira, me he engrandecido y he crecido en sabiduría sobre todos los que fueron antes de mí en Jerusalem, y mi corazón ha experimentado sabiduría y conocimiento en abundancia.
Porque al hombre que le agrada, Él le da sabiduría, conocimiento y gozo, pero al pecador le impone la tarea de recoger y amontonar para darlo a quien Ha-’Elohim le agrada.° Esto también es vanidad y correr tras el viento.
Tu lo verás, radiante de alegría, Y tu corazón se estremecerá y se regocijará, Cuando vuelquen sobre ti el comercio del mar,° Y te traigan la riqueza de las naciones.
Como no puede ser contado el ejército de los cielos, ni se puede medir la arena del mar, así multiplicaré la descendencia de mi siervo David y los levitas que me sirven.
Él muda los tiempos y las edades. Él quita los reyes y establece los reyes. Él da la sabiduría a los sabios, Y ciencia a los inteligentes,
Todos ellos vienen en son de violencia. Sus rostros están fijos hacia el viento del oriente, y recogen cautivos como arena.
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay cambio ni sombra de variación.
Y si alguno de vosotros carece de sabiduría, pídala al que da, a Dios, que da a todos generosamente y sin reproche,° y le será dada.
Pero la sabiduría de lo alto, es primeramente pura, luego pacífica, comprensiva, dispuesta a razonar, llena de misericordia y de buenos frutos, imparcial, sincera.
Y Madián y Amalec, con todos los orientales, estaban esparcidos por el valle como multitud de langostas, y sus camellos eran incontables como la arena que está a la orilla del mar.