Nehemías 3:20 - La Biblia Textual 3a Edicion

²⁰ Tras él, Baruc ben Zabay se apresuró a reparar el tramo que va desde este ángulo hasta la puerta de la casa de Eliasib, el sumo sacerdote.

Больше версий

Biblia Reina Valera 1960

²⁰ Después de él Baruc hijo de Zabai con todo fervor restauró otro tramo, desde la esquina hasta la puerta de la casa de Eliasib sumo sacerdote.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁰ Junto a él estaba Baruc, hijo de Zabai, quien reparó con entusiasmo una sección adicional, desde el ángulo hasta la puerta de la casa de Eliasib, el sumo sacerdote.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁰ después de ellos venía Baruc hijo de Zabay, desde el ángulo de la muralla hasta la puerta de la casa del Sumo sacerdote Eliasib;'

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁰ Después de él, Baruc, hijo de Zabay, trabajó en la restauración del tramo siguiente, desde el ángulo hasta la puerta de la casa del sumo sacerdote Eliasib.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²⁰ Después de él Baruc, hijo de Zabai, con gran fervor restauró otro tramo, desde la esquina hasta la puerta de la casa de Eliasib, el sumo sacerdote.

Nehemías 3:20 Перекрёстные ссылки

Esdras 10:28

De los hijos de Bebai: Johanán, Hananías, Zabai, Atlai.

Nehemías 10:6

Daniel, Ginetón, Baruc,

Nehemías 13:28

Y ahuyenté de mi lado a uno de los hijos de Joiada, hijo del sumo sacerdote Eliasib, porque era yerno de Sanbalat horonita.

Nehemías 13:4

Pero antes de esto, el sacerdote Eliasib, encargado de la cámara de la Casa de nuestro Dios, había emparentado con Tobías,

Nehemías 3:1

Entonces el sumo sacerdote Eliasib se levantó con sus hermanos los sacerdotes, y reedificaron la puerta de las Ovejas. Ellos mismos consagraron y levantaron las puertas, desde la torre Hamea hasta la torre Hanan-’El.

Nehemías 3:21

Tras él, Meremot ben Urías, hijo de Cos, reparó otro tramo desde la entrada de la casa de Eliasib hasta el extremo de la casa de Eliasib.

Eclesiastés 9:10

Todo cuanto halle hacer tu mano, hazlo con tus fuerzas, porque en el Seol, adonde vas, no hay obra ni propósito, ni conocimiento ni sabiduría.

Romanos 12:11

en cuanto a diligencia,° no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor;