Mateo 8:15 - La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ y tocando su mano, la fiebre la dejó; y fue levantada, y lo servía.

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Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ Jesús le tocó la mano, y la fiebre se fue. Entonces ella se levantó y le preparó una comida.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ Jesús le tocó la mano y se le pasó la fiebre. Ella se levantó y comenzó a atenderle.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ le tocó la mano y se le quitó la fiebre. Ella se levantó y se puso a servirle.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁵ Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.

Mateo 8:15 Перекрёстные ссылки

2 Reyes 13:21

y en momentos en que unos sepultaban a un hombre, advirtieron que venía una banda, y arrojaron al muerto al sepulcro de Eliseo; y apenas el cadáver tocó los huesos de Eliseo, revivió y se levantó sobre sus pies.

Isaías 6:7

y tocando con ella mi boca, dijo: ¡He aquí esto toca tus labios: quitada es tu culpa y limpio tu pecado!

Mateo 14:36

y le rogaban tan sólo tocar el borde de su manto; y cuantos lo tocaron, fueron sanados.

Mateo 20:34

Entonces Jesús, movido a compasión, les tocó los ojos, y al instante recobraron la vista, y lo siguieron.

Mateo 8:14

Y llegando Jesús a la casa de Pedro, vio a la suegra de éste postrada en cama y con fiebre,

Mateo 8:16

Al atardecer le trajeron muchos endemoniados, y con su° palabra echó los demonios y sanó a todos los enfermos,

Mateo 8:3

Y extendiendo la mano lo tocó diciendo: Quiero, sé limpio. Y al instante fue limpiada su lepra.

Mateo 9:20

Y he aquí una mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, se acercó por detrás y agarró el borde° de su manto.

Mateo 9:29

Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe° os sea hecho.

Marcos 1:29

Y saliendo de la sinagoga, fueron enseguida con Jacobo y Juan a la casa de Simón y Andrés.

Marcos 1:41

Y se le enternecieron las entrañas, y extendiendo su mano lo tocó, y le dice: Quiero, ¡sé limpio!

Lucas 8:54

Pero Él, tomando su mano, clamó, diciendo: ¡Niña, levántate!