Mateo 22:3 - La Biblia Textual 3a Edicion

³ Y envió a sus siervos para llamar a los que habían sido invitados a la fiesta de bodas, y no querían venir.°

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Biblia Reina Valera 1960

³ y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas estos no quisieron venir.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Cuando el banquete estuvo listo, el rey envió a sus sirvientes para llamar a los invitados. ¡Pero todos se negaron a asistir!

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ por lo que mandó a sus servidores a llamar a los invitados a la fiesta. Pero éstos no quisieron venir.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Envió sus criados a llamar a los convidados al banquete, pero éstos no quisieron venir.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³ y envió a sus siervos para que llamasen a los invitados a las bodas; mas no quisieron venir.

Mateo 22:3 Перекрёстные ссылки

Salmos 68:11

Adonay da la orden: ¡Las que dan buenas noticias son multitud!

Isaías 30:15

Pues así decía el Soberano, YHVH, el Santo de Israel: Vuestra salvación está en volveros a mí y tener calma; Vuestra fortaleza consiste en confiar y estar tranquilos; pero no quisisteis,

Jeremías 25:4

YHVH os envió a todos sus siervos los profetas, madrugando y sin cesar, y no quisisteis escuchar ni prestar oído,

Jeremías 35:15

Os he enviado a mis siervos los profetas, madrugando y sin cesar, para deciros: Volveos ahora cada uno de vuestro mal camino, y enmendad vuestras obras, y no vayáis en pos de dioses ajenos para servirles, y habitaréis en la tierra que os di a vosotros y a vuestros padres. Pero no habéis inclinado vuestros oídos, ni me habéis obedecido.

Oseas 11:2

Cuanto más los llamaba, tanto más se alejaban de ellos.° Ofrecían sacrificios a los baales, y quemaban incienso a los ídolos.

Oseas 11:7

Mi pueblo vacila en volver a mí, aunque lo llaman desde lo Alto, Todos juntos no pueden levantarlo.°

Sofonías 1:7

¡Silencio en presencia de Adonay YHVH! El día de YHVH está cercano. YHVH ha preparado un sacrificio, y ha escogido° a sus invitados.

Mateo 21:34

Y cuando se acercó el tiempo de los frutos, envió a sus siervos° a los labradores para recibir sus frutos.°

Mateo 23:37

¡Jerusalem, Jerusalem, que matas a los profetas, y apedreas a los que te han sido enviados! ¡Cuántas veces quise° juntar a tus hijos, como la gallina junta sus polluelos bajo las alas, y no quisisteis!

Mateo 3:2

diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos° se ha acercado.°

Mateo 9:15

Jesús les dijo: ¿Acaso los que asisten al esposo° pueden tener luto mientras el esposo está con ellos? Pero vendrán días cuando les sea quitado el esposo; entonces ayunarán.

Lucas 13:34

¡Jerusalem, Jerusalem, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise recoger a tus hijos como la gallina a sus polluelos bajo sus alas, y no quisisteis!°

Lucas 15:28

Y se enojó y no quería entrar. Saliendo entonces su padre, le rogaba.

Lucas 19:27

Y a aquellos enemigos míos que no quisieron que yo llegara a reinar sobre ellos, ¡traedlos acá y decapitadlos ante mi presencia!°

Juan 5:40

¡Y no queréis venir a mí para tener vida!

Hechos 13:45

Pero los judíos, viendo a las multitudes, se llenaron de envidia y blasfemando, contradecían las palabras que Pablo hablaba.

Romanos 10:21

Pero acerca de Israel dice: Todo el día extendí mis manos a un pueblo rebelde y contradictor.°

Hebreos 12:25

Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra,° mucho menos nosotros, si volvemos la espalda al que nos habla desde los cielos;

Hebreos 9:15

Por tanto es mediador de un nuevo pacto, para que habiendo ocurrido una muerte para la remisión de las transgresiones cometidas durante el primer pacto, los que han sido llamados reciban la promesa de la herencia eterna.

Apocalipsis 22:17

Y el Espíritu y la Esposa dicen: ¡Ven! Y el que oye, diga: ¡Ven! Y el que tenga sed, venga, y el que quiera, tome gratuitamente del agua de la vida.°

1 Samuel 9:13

Al entrar en la ciudad, buscadlo, antes que suba al lugar alto a comer, pues el pueblo no comerá hasta que él haya llegado, por cuanto él es el que bendice el sacrificio, y después comen los invitados. Ahora pues, subid, porque enseguida lo hallaréis.