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Miqueas 2:9 - Biblia Nacar-Colunga

9 Arrojáis a las mujeres de mi pueblo de su querido hogar y arrebatáis para siempre de sus hijos mi gloria.

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Biblia Reina Valera 1960

9 A las mujeres de mi pueblo echasteis fuera de las casas que eran su delicia; a sus niños quitasteis mi perpetua alabanza.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Desalojaron a las mujeres de sus cómodos hogares y despojaron a sus hijos para siempre de todo lo que Dios les hubiera dado.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Arrancan de sus hogares tan queridos a las mujeres de mi pueblo y les quitan a sus hijos la libertad que yo les había dado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Echáis a las mujeres de mi pueblo fuera del calor de sus hogares, Y quitáis para siempre a sus hijitos la gloria del legado° que les di.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Arrojáis a las mujeres de mi pueblo del hogar que era su delicia. Arrebatáis a sus pequeñuelos para siempre el honor que yo les di.

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Miqueas 2:9
14 Перекрёстные ссылки  

Llenaráse la tierra del conocimiento de la gloria de Yahvé como las aguas llenan el mar.


Haré ante las gentes muestra de mi gloria, y todas verán las justicias que yo hago y los castigos con que hiere mi mano.


Porque Dios, que dijo: Brille la luz del seno de las tinieblas, es el que ha hecho brillar la luz en nuestros corazones para que demos a conocer la ciencia de la gloria de Dios que brilla en el rostro de Cristo.


Todos nosotros a cara descubierta reflejamos la gloria del Señor como en un espejo y nos transformamos en la misma imagen, de gloria en gloria, a medida que obra en nosotros el espíritu del Señor.


mientras devoran las casas de las viudas y hacen ostentación de largas oraciones. Estos tendrán un juicio más severo.


mientras devoran las casas de las viudas y simulan largas oraciones. Estos tendrán un juicio muy severo.


¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas, que cerráis a los hombres el reino de los cielos! Ni entráis vosotros ni permitís entrar a los que querían entrar.


(9) Y yo seré para ella, dice Yahvé, muro de fuego en derredor, y seré su gloria en medio de ella.


Codician campos, y los roban; casas, y se apoderan de ellas; y hacen violencia al dueño y a su casa, al hombre y a su heredad.'


que vendisteis los hijos de Judá y los de Jerusalén a los hijos de los griegos para que los llevasen lejos de sus territorios;'


Mi tienda está devastada, y todas mis cuerdas rotas; mis hijos me han abandonado, no existen ya; hay quien despliegue mi tienda y levante mis lonas.'


Y bendito sea por siempre su glorioso nombre, y llénese de su gloria toda la tierra. Amén. Amén.


Si es Yahvé quien te excita contra mí, que El reciba el olor de una ofrenda; pero, si son los hombres, malditos sean de Yahvé, pues me echan ahora de mi puesto en la heredad de Yahvé, diciendo: “Vete a servir a dioses ajenos,”


Aplastan sobre el polvo de la tierra la cabeza de los pobres, y estorban el camino de los humildes, y van padre e hijo a la doncella, profanando mi santo nombre.


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