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Jeremías 7:2 - Biblia Nacar-Colunga

2 Ponte a la puerta del templo y pronuncia estas palabras y di: Oíd la palabra de Yahvé todos los de Judá que entráis por estas puertas para adorar a Yahvé.

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Больше версий

Biblia Reina Valera 1960

2 Ponte a la puerta de la casa de Jehová, y proclama allí esta palabra, y di: Oíd palabra de Jehová, todo Judá, los que entráis por estas puertas para adorar a Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 «Vete a la entrada del templo del Señor y dale el siguiente mensaje al pueblo: “Oh Judá, ¡escucha este mensaje del Señor! ¡Escúchenlo, todos ustedes que aquí adoran al Señor!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Párate en la puerta de la Casa de Yavé y publica allí esta palabra: Escuchen, hombres de Judá, que entran por esta puerta a adorar a Yavé.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Ponte en la puerta de la Casa de YHVH, y proclama allí esta palabra. Di: ¡Oíd el oráculo de YHVH, todos los habitantes de Judá que entráis por estas puertas para postrarse ante YHVH!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 'Ponte en la puerta del templo de Yahveh y anuncia allí esta palabra y di: escuchad la palabra de Yahveh, todos los de Judá, que entráis por estas puertas para adorar a Yahveh.

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Jeremías 7:2
38 Перекрёстные ссылки  

Así dice Yahvé: Ve a ponerte en el atrio de la casa de Yahvé y habla (a las gentes de) todas las ciudades de Judá, que vienen a prosternarse en la casa de Yahvé, todas las palabras que yo te he ordenado decirles, sin omitir nada.


El que tenga oídos oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.


Escucha, pues, ahora la palabra de Yahvé: Tú me dices: No profetices contra Israel ni hagas predicciones contra la casa de Isaac


Oíd la palabra de Yahvé, príncipes de Sodoma; aprestad el oído a la ley de nuestro Dios, pueblo de Gomorra.'


¡Escuchad, pueblos todos! ¡Atiende tu tierra y cuanto en ella se contiene! Que el Señor, Yahvé, va a litigar con vosotros; el Señor, desde su santo templo.'


Oíd esto, sacerdotes. Escucha, ¡casa de Israel! Presta oído, ¡casa del rey! ¡que es contra vosotros la sentencia, pues habéis venido a ser un lazo para Mispá y una red tendida en el Tabor.


Dijo, pues, Jeremías a todo el pueblo y a todas las mujeres: Oíd la palabra de Yahvé todos los de Judá que habitáis en la tierra de Egipto:


y leyó Baruc el libro de los sermones de Jeremías en el templo, en la cámara de Gamarías, hijo de Safan, escriba, en el vestíbulo superior, a la entrada de la Puerta Nueva del templo, oyendo todo el pueblo.


vete, pues, tú y en el libro que a mi dictado has escrito lee las palabras de Yahvé, oyendo el pueblo en el templo en un día de ayuno y oyendo todos los que vienen de todo Judá y de sus ciudades,


Oye, pues, ¡oh Sedecías, rey de Judá! lo que dice Yahvé: Esto es lo que te dice a ti: No morirás a la espada,


Y se volvió Jeremías del “Tofet,” donde le había enviado Yahvé para que profetizara, y se detuvo en el atrio del templo, y dijo a todo el pueblo:


Oíd, casa de Israel, lo que os dice Yahvé.


Oíd la palabra de Yahvé, casa de Jacob, y todas las familias de la casa de Israel.


Díjole entonces Miqueas: “Oye, pues, Ja palabra de Yahvé: He visto a Yahvé sentado sobre su trono y rodeado de todo el ejército de los cielos, que estaba a su derecha y a su izquierda;'


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.


El que tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias. Al que venciere le daré del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en ella escrito un nombre nuevo, que nadie conoce sino el que lo recibe.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El vencedor no sufrirá daño de la segunda muerte.


El que tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré a comer del árbol de la vida, que está en el paraíso de mi Dios.


y en el templo y en las casas no cesaban todo el día de enseñar y anunciar a Cristo Jesús.


Id, presentaos en el templo y predicad al pueblo todas estas palabras de vida.


Respondióle Jesús: Yo públicamente he hablado al mundo; siempre enseñé en las sinagogas y en el templo, adonde concurren todos los judíos; nada hablé en secreto,'


El que tenga oídos, que oiga.


Oíd, pues, cabezas de la casa de Jacob y jueces de la casa de Israel, que aborrecéis el derecho y torcéis todo lo recto;'


Yo digo: Oíd, caudillos de Jacob y jueces de la casa de Israel: ¿No os toca a vosotros conocer el derecho?


Estuvieron nuestros pies en tus puertas, ¡oh Jerusalén!


Anda y clama a los oídos de Jerusalén: Así habla Yahvé: Me acuerdo en favor tuyo del afecto de tu adolescencia, del amor de tus desposorios, de tu seguirme en el desierto, tierra donde no se siembra,


Palabra de Yahvé que llegó a Jeremías, diciéndole:


Y me dijo Yahvé: Anuncia todas estas palabras en las ciudades de Judá y en las plazas de Jerusalén, diciendo: Escuchad las palabras de esta alianza y cumplidlas,


Fue sobre mí la mano de Yahvé, y llevóme Yahvé fuera y me puso en medio de un campo que estaba lleno de huesos.


Y dijo Jeremías, profeta, al profeta Ananías, delante de los sacerdotes y de todo el pueblo que estaban en la casa de Yahvé:


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