Jeremías 37:15 - Biblia Nacar-Colunga

¹⁵ que, airados contra Jeremías, le hicieron azotar y encerrar en la cárcel que había en la casa de Jonatán, escriba, de la cual habían hecho prisión.

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Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Y los príncipes se airaron contra Jeremías, y le azotaron y le pusieron en prisión en la casa del escriba Jonatán, porque la habían convertido en cárcel.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ Ellos estaban furiosos con Jeremías y mandaron que lo azotaran y lo encarcelaran en la casa del secretario Jonatán porque la casa de Jonatán había sido convertida en prisión.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ Estos, furiosos contra Jeremías, lo golpearon y lo encerraron en casa del secretario Jonatán, que habían convertido en cárcel.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ Y los príncipes se airaron contra Jeremías, y lo azotaron y lo pusieron en prisión en la casa del escriba Jonatán, pues la habían convertido en cárcel.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ Los jefes se encolerizaron contra Jeremías, lo golpearon y lo metieron en la prisión de la casa de Jonatán, el secretario, convertida en cárcel.

Jeremías 37:15 Перекрёстные ссылки

Jeremías 38:26

les responderás: He suplicado al rey que no me haga volver a la casa de Jonatán, pues moriría allí.

Hechos 5:18

echaron mano a los apóstoles y los metieron en la cárcel pública.

Mateo 21:35

Pero los viñadores, cogiendo a los siervos, a uno le atormentaron, a otro lo mataron, a otro le apedrearon.

Jeremías 26:16

Y dijeron los magistrados y todo el pueblo a los sacerdotes y los profetas: No es reo de muerte este hombre por hablarnos en nombre de Yahvé, nuestro Dios.

2 Crónicas 18:26

y decid: Esto dice el rey: Meted a éste en la carcel y mantenedle con pan de aflicción y agua de angustia hasta que yo vuelva en paz.”

2 Crónicas 16:10

Irritóse Asa contra el vidente y le puso en prisión, porque se encolerizó mucho contra él, y al mismo tiempo oprimió también Asa a algunos del pueblo,

Génesis 39:20

y, tomando a José, le metió en la cárcel donde estaban encerrados los presos del rey, y allí en la cárcel quedó José.

Apocalipsis 2:10

Nada temas por lo que tienes que padecer. Mira que el diablo os va a arrojar a algunos en la cárcel para que seáis probados, y tendréis una tribulación de diez días. Sé fiel hasta la muerte y te daré la corona de la vida.

Hechos 5:40

e introduciendo luego a los apóstoles, después de azotados, les conminaron que no hablasen en el nombre de Jesús y los despidieron.

Hechos 5:28

Solemnemente os hemos ordenado que no enseñaseis sobre este nombre, y habéis llenado a Jerusalén de vuestra doctrina y queréis traer sobre nosotros la sangre de ese hombre.

Juan 18:22

Habiendo dicho esto Jesús, uno de los ministros, que estaba a su lado, le dio una bofetada, diciendo: ¿Así respondes al Sumo Sacerdote?

Lucas 22:64

y, vendándole, le preguntaban, diciendo: Profetízanos, ¿quién es el que te hirió?

Mateo 23:34

Por esto os envío yo profetas, sabios y escribas, y a unos los mataréis y los crucificaréis, a otros los azotaréis en vuestras sinagogas y los perseguiréis de ciudad en ciudad,

Jeremías 38:6

Prendieron, pues, a Jeremías y le metieron en la cisterna de Melquías, hijo del rey, que está en el vestíbulo de la cárcel, bajándole con cuerdas a la cisterna, en la que no había agua, aunque sí lodo, y quedó Jeremías metido en el lodo.

Jeremías 37:20

Óyeme, pues; ¡oh rey, mi señor! te lo ruego; acoge mi súplica y no me vuelvas a la prisión de la casa de Jonatán, escriba, porque moriré allí.'

Jeremías 18:23

Pero tú, ¡oh Yahvé! conoces sus maquinaciones de muerte contra mí. No les perdones por su iniquidad, no borres su pecado de ante tus ojos; caigan ante ti; en el día de tu ira obra sobre ellos.'

Jeremías 37:4

Y Jeremías andaba libremente entre el pueblo, pues todavía no le habían encarcelado.

Jeremías 32:2

Entonces el ejército del rey de Babilonia cercaba a Jerusalén, y el profeta Jeremías estaba encerrado en el atrio de la guardia del palacio del rey de Judá,

Jeremías 39:15

Jeremías había recibido palabra de Yahvé, mientras estaba preso en el vestíbulo de la guardia, diciéndole: