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Génesis 37:25 - Biblia Nacar-Colunga

25 Sentáronse a comer, y, alzando los ojos, vieron venir una caravana de ismaelitas que venía de Galaad, cuyos camellos iban cargados de estoraque, tragacanto y láudano, que llevaban a Egipto;'

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Biblia Reina Valera 1960

25 Y se sentaron a comer pan; y alzando los ojos miraron, y he aquí una compañía de ismaelitas que venía de Galaad, y sus camellos traían aromas, bálsamo y mirra, e iban a llevarlo a Egipto.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Luego, justo cuando se sentaron a comer, levantaron la vista y vieron a la distancia una caravana de camellos que venía acercándose. Era un grupo de mercaderes ismaelitas que transportaban goma de resina, bálsamo y resinas aromáticas desde Galaad hasta Egipto.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Se sentaron para comer, cuando alzando los ojos, vieron una caravana de ismaelitas que venía de Galaad, con sus camellos cargados de bálsamo, mirra y otras especias que llevaban a Egipto.

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La Biblia Textual 3a Edicion

25 Luego se sentaron a comer pan, y alzando sus ojos vieron una caravana de ismaelitas que venía de Galaad,° llevando en sus camellos especias, bálsamo y mirra para hacerlos bajar a Egipto.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 Sentáronse a comer. Al alzar la vista, vieron una caravana de ismaelitas que iban desde Galaad a Egipto con sus camellos cargados de goma, resina y láudano.

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Génesis 37:25
22 Перекрёстные ссылки  

Israel, su padre, les dijo: “Si es así, haced esto: tomad de los mejores productos de esta tierra en vuestro equipaje y bajádselos al hombre aquel como presente: un poco de tragacanto, un poco de miel, astrágalo, láudano, alfósigos y almendras.


y, cuando pasaban los mercaderes madianitas, sacaron a José, subiéndole del pozo, y por veinte monedas de plata se lo vendieron a los ismaelitas, que le llevaron a Egipto.


¿Por ventura no había bálsamo en Galaad ni había médicos allí? ¿Cómo, pues, no surgió la curación de la hija de mi pueblo?


los madianitas le vendieron en Egipto a Putifar, ministro del faraón y jefe de la guardia.


Beben vino en copas y se ungen con el más exquisito óleo, y no sienten preocupación alguna por la ruina de José.


¡Sube a Galaad en busca de bálsamo, virgen hija de Egipto ! En vano multiplicarás los remedios, no hay cura para ti.


Este es el obrar de la mujer adúltera: después de haber comido se limpia la boca y dice: “Nada de mal he hecho.”


¿No saben todos los obradores de iniquidad que comen mi pueblo como el pan, que no invocan a Yahvé?


Entretanto, a José, que había sido llevado a Egipto y comprado a los ismaelitas por Putifar, ministro del faraón y jefe de la guardia, egipcio,


y, tornando consigo a sus parientes, le persiguió durante siete días, hasta darle alcance en el monte de Galaad.


Pues todos a una se han confabulado, se han ligado estrechamente contra ti:


Los correos partieron apresuradamente, según la orden del rey. El edicto se publicó en Susa, en la ciudadela; y mientras el rey y Aman bebían, estaba la ciudad de Susa consternada.'


Huyó con todo cuanto tenía, y, ya en camino, atravesó el río y se dirigió al monte de Galaad.


y, cogiéndole, le arrojaron al pozo, un pozo vacío que no tenía agua.


Galaad, el territorio de Gesur y de Macat, toda la montaña de Hermón y todo el Basan, hasta Saleca;'


Pues así dice Yahvé del palacio del rey de Judá: Eres para mí como (el monte) de Galaad, (como la) cumbre del Líbano. Ciertamente te haré un desierto, ciudad inhabitada.


Del lado de oriente, la frontera entre Haurán, Damasco, Galaad y la tierra de Israel será el Jordán; mediréis desde el confín hasta el mar Oriental hasta Tamar. Esta es la frontera oriental.'


Esposo. Voy a mi jardín, hermana mía, esposa, a tomar de mi mirra y de mi bálsamo, a comer mi panal y mi miel, a beber de mi vino y de mi leche. Comed, colegas míos, y bebed, y embriagaos, amigos míos.


Ved cómo se tienden en marfileños divanes, e, indolentes, se tumban en sus lechos. Comen corderos del rebaño y terneros sacados del establo.


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