Biblia Todo Logo
Онлайн Библия

- Реклама -





Génesis 18:30 - Biblia Nacar-Colunga

30 Volvió a insistir Abraham: “No te incomodes, Señor, si hablo todavía: ¿Y si se hallasen allí treinta justos?” Repuso: “Tampoco lo haría si se hallasen treinta.”

См. главу Копировать


Больше версий

Biblia Reina Valera 1960

30 Y dijo: No se enoje ahora mi Señor, si hablare: quizá se hallarán allí treinta. Y respondió: No lo haré si hallare allí treinta.

См. главу Копировать

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 —Por favor, no te enojes, mi Señor —rogó Abraham—. Permíteme seguir hablando. ¿Supongamos que se encontraran solamente treinta justos? El Señor le contestó: —No la destruiré si encuentro treinta.

См. главу Копировать

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Abrahán continuó todavía: 'No se enoje mi Señor si sigo hablando, pero tal vez no se encuentren más que treinta justos. Yavé contestó: 'No lo haré si encuentro allí treinta justos.

См. главу Копировать

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Entonces dijo: No se enoje ahora mi Señor, y podré hablar: Quizá se hallen allí treinta. Y dijo: No actuaré si hallo allí treinta.

См. главу Копировать

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Insistió Abrahán: 'No se enoje mi Señor, si me atrevo a seguir hablando. ¿Y si hay treinta?'. Contestó: 'No lo haré si hallo allí los treinta'.

См. главу Копировать




Génesis 18:30
12 Перекрёстные ссылки  

y la casa se llenó de humo. Yo me dije: “¡Ay de mí, perdido soy, porque, siendo un hombre de impuros labios, que habita en medio de un pueblo de labios impuros, he visto con mis ojos al Rey, Yahvé de los ejércitos!”


¿Quién sobre las nubes comparable a Yahvé, quién semejante a Yahvé entre los hijos de Dios?


Tau. Tú, ¡oh Yahvé! oyes los gritos de los humildes, fortaleces su corazón, les das oídos;'


?ain. Cantad a Yahvé, que mora en Sión; anunciad a los pueblos sus proezas.'


(9) ¿Tienes tú brazos como los de Dios y puedes tronar con voz semejante a la suya?


Gedeón dijo a Dios: “Que no se encienda tu cólera contra mí si hablo todavía otra vez; quisiera hacer otra prueba con el vellón: que sea el vellón el que se quede seco y caiga el rocío sobre todo el suelo.”


Acercóse entonces Judá y le dijo: “Por favor, señor mío, que pueda decir tu siervo unas palabras en tu oído sin que contra tu siervo se encienda tu cólera, pues eres como otro faraón.


Insistió Abraham todavía, y dijo: “¿Y si se hallasen allí cuarenta?” Contestóle: “También por los cuarenta lo haría.”


Volvió a insistir: “Señor, ya que comencé; ¿y si se hallasen allí veinte justos?” Y contestó: “No la destruiría por los veinte.”


Подписывайтесь на нас:

Реклама


Реклама