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Génesis 18:14 - Biblia Nacar-Colunga

14 ¿Hay algo imposible para Yahvé? A otro año por este tiempo volveré, y Sara tendrá ya un hijo.”

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Больше версий

Biblia Reina Valera 1960

14 ¿Hay para Dios alguna cosa difícil? Al tiempo señalado volveré a ti, y según el tiempo de la vida, Sara tendrá un hijo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 ¿Existe algo demasiado difícil para el Señor? Regresaré dentro de un año, y Sara tendrá un hijo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 ¿Hay acaso algo imposible para Yavé? Pues bien, volveré a visitarte dentro de un año, y para entonces Sara tendrá un hijo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 ¿Acaso hay algo imposible para YHVH?° En el momento señalado volveré a ti, según el tiempo de la vida, y Sara tendrá un hijo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 ¿Es que hay algo imposible para Yahveh? En el tiempo señalado, dentro de un año, volveré de nuevo y para entonces Sara tendrá un hijo'.

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Génesis 18:14
38 Перекрёстные ссылки  

porque nada hay imposible para Dios.


Mirándolos, Jesús les dijo: Para los hombres, imposible; mas para Dios todo es posible.'


Fijando en ellos Jesús su mirada, les dijo: A los hombres sí es imposible, mas no a Dios, porque a Dios todo le es posible.


Mira, yo soy Yahvé, Dios de toda carne. ¿Hay algo difícil para mí?


Al que es poderoso para hacer que copiosamente abundemos más de lo que pedimos o pensamos, en virtud del poder que actúa en nosotros,


Sé que lo puedes todo y que no hay nada que te cohiba.


Todo lo puedo en aquel que me conforta.


¡Ah Señor, Yahvé ! Tú has hecho los cielos y la tierra con tu gran poder y tu brazo extendido. ¡Nada es difícil a ti!


convencido de que Dios era poderoso para cumplir lo que había prometido;'


Yahvé replicó a Moisés: “¿Acaso se ha acortado el brazo de Yahvé? Ya verás si es o no es como yo te he dicho.”


El le dijo: “El año que viene, por este tiempo, abrazarás a tu hijo.” “No, por favor, mi señor; no engañes a tu sierva.”


No los temas, porque en medio de ti está Yahvé, tu Dios; el Dios grande y terrible.'


Al instante Jesús le tendió la mano y le cogió, diciéndole: Hombre de poca fe, ¿por qué has dudado?


Así dice Yahvé de los ejércitos: Si esto es difícil a los ojos del resto de su pueblo en estos días, ¿lo será también a mis ojos? dice Yahvé de los ejércitos.


¿Qué Dios hay como tú, que perdonas la maldad y pasas por alto el pecado del resto de tu heredad? No persiste por siempre en su enojo, porque gusta de la piedad.


Porque Dios grande es Yahvé, Rey grande sobre todos los dioses,


también Yahvé, tu Dios, reducirá a tus cautivos, tendrá misericordia de ti y te reunirá de nuevo en medio de todos los pueblos entre los cuales te dispersó.


Y dijo uno de ellos: “A otro año por este tiempo volveré sin falta, y ya tendrá un hijo Sara, tu mujer.” Sara oía desde la puerta de la tienda, que estaba a espaldas del que hablaba.


Dijóle el ángel: “No temas, Zacarías, porque tu plegaria ha sido escuchada, e Isabel, tu mujer, te dará a luz un hijo, al que pondrás por nombre Juan.


Mira, Dios es poderoso y no desprecia al puro de corazón.


pero mi pacto lo estableceré con Isaac, el que te parirá Sara el año que viene por este tiempo.”


pensando que hasta de entre los muertos podría Dios resucitarle. Por eso le recuperó también en figura.


Pero Jesús, que lo oyó, le respondió: No temas, cree tan sólo y será sana.


Jonatán dijo a su escudero: “Anda, vamos a pasar al puesto de los incircuncisos; puede ser que Yahvé nos ayude, pues nada le impide salvar con muchos o con pocos.”


que transformará nuestro cuerpo miserable, conforme a su cuerpo glorioso, en virtud del poder que tiene para someter a sí todas las cosas.


Dijo Zacarías al ángel: “¿Y qué señal tendré de esto? Porque yo soy ya viejo, y mi mujer avanzada en edad.”


y no os forjéis ilusiones diciéndoos: Tenemos a Abraham por padre. Porque yo os digo que Dios puede hacer de estas piedras hijos de Abraham.


Reina Yahvé, se vistió de majestad, vistióse de poder Yahvé y se ciñó; cimentó el orbe: no se conmoverá.'


Vuélvete, ¡oh Yahvé! ¿hasta cuándo?., y ten compasión de tus siervos.


Y dijo Yahvé a Abraham: “¿Por qué se ha reído Sara, diciéndose: De veras voy a parir, siendo tan vieja?


Temerosa, Sara negó haberse reído, diciendo: “No me he reído”; pero El le dijo: “Sí, te has reído.”


Visitó, pues, Yahvé a Sara, como le dijera, e hizo con ella lo que le prometió;'


y concibió Sara, y dio a Abraham un hijo en su ancianidad, al tiempo que le había dicho Dios.


¿Por qué, cuando yo venía, no hallaba a nadie, y, cuando llamaba, nadie me respondía? ¿Habráse acortado mi mano para redimir o no tendré ya fuerza para librar? He aquí que con mi amenaza seco el mar y torno en desierto los ríos, hasta pudrirse sus peces por falta de agua y morir de sed sus vivientes.


(21) y acercándose al foso de los leones, llamó con tristes voces a Daniel, y, hablando el rey a Daniel, decía: Daniel, siervo del Dios vivo, el Dios tuyo, a quien perseverante sirves, ¿ha podido librarte de los leones?


pues la bendeciré, y te daré de ella un hijo, a quien bendeciré, y engendrará pueblos, y saldrán de él reyes de pueblos.”


El ángel de Yahvé se apareció a la mujer y le dijo: “Eres estéril y sin hijos, pero vas a concebir y parirás un hijo.


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