Eclesiastés 2:8 - Biblia Nacar-Colunga

⁸ Amontoné plata y oro, tesoros de reyes y provincias. Híceme con cantores y cantoras, y cuanto es deleite del hombre, princesas sin número.

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Biblia Reina Valera 1960

⁸ Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Junté grandes cantidades de plata y de oro, el tesoro de muchos reyes y provincias. Contraté cantores estupendos, tanto hombres como mujeres, y tuve muchas concubinas hermosas. ¡Tuve todo lo que un hombre puede desear!

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Amontoné el oro y la plata, todas las riquezas que me venían de los reyes y de las provincias. Tuve cantantes y coristas, y lo que más deleita al hombre: mujeres, muchas mujeres.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ Acumulé para mí plata y oro, tesoro digno de reinos y provincias; contraté cantores y cantoras, y tuve un harén de concubinas para gozar como suelen los hombres.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Amontoné plata y oro, tesoros de reyes y provincias. Me procuré cantores y cantoras, todo placer humano y no pocas mujeres.

Eclesiastés 2:8 Перекрёстные ссылки

1 Reyes 10:10

Dio al rey ciento veinte talentos de oro, una gran cantidad de aromas y de piedras preciosas. No se vieron nunca después tantos aromas como los que la reina de Saba dio al rey Salomón.

1 Reyes 9:28

y fueron hasta Ofir, y trajeron de allí oro, cuatrocientos veinte talentos, que llevaron al rey Salomón.

2 Samuel 19:35

Pero Barzilai respondió al rey: “¿Cuántos años voy a vivir yo, para ir con el rey a Jerusalén?

1 Reyes 10:14

El peso de oro que cada año llegaba a Salomón era de seiscientos sesenta y seis talentos de oro,

Amós 6:5

Bailan al son de la cítara e inventan — como David — instrumentos músicos.

Daniel 3:15

Ahora, pues, aprestaos, y, en oyendo el sonido de las trompetas, las cítaras, las arpas, los salterios, las gaitas y toda suerte de instrumentos músicos, postraos y adorad la estatua que yo he hecho, y si no la adoráis, al instante seréis arrojados a un horno encendido. ¿Y quién será el Dios que os libre de mis manos?

Daniel 3:7

Por tanto, los pueblos todos, al oír el sonido de las trompetas, las arpas, los salterios, las gaitas e instrumentos músicos de toda suerte, todos los pueblos, naciones y hombres de toda lengua se prosternarán y adorarán la estatua de oro alzada por el rey Nabucodonosor.

Daniel 3:5

En cuanto oigáis el sonido de las trompetas, las cítaras, las arpas, los salterios, las gaitas y toda suerte de instrumentos, adorad, postrados, la estatua de oro que ha alzado el rey Nabucodonosor.

Esdras 2:65

sin contar los siervos y siervas, en número de siete mil trescientos treinta y siete. Entre ellos había trescientos cantores y cantoras.

2 Crónicas 9:11

Con la madera de sándalo hizo el rey las gradas de la casa de Yahvé y las de la casa del rey, e hizo también de ella arpas y salterios para los cantores. Nunca en tierra de Judá se había visto semejante.

1 Crónicas 25:6

Todos éstos de Asaf, de Jedutún y de Hernán fueron puestos bajo la dirección de sus padres para cantar en el templo de Yahvé tocando los címbalos, las arpas y los salterios, cumpliendo los ministerios de la casa de Yahvé según el orden prescrito por el rey.

1 Crónicas 25:1

David y los jefes del ejército separaron a los que de entre los hijos de Asaf, de Hernán y de Jedutún habían de hacer el oficio de cantores, acompañándose del arpa, del salterio y de los címbalos, cumpliendo cada uno el oficio a que se le destinaba en proporción de su número.

1 Reyes 14:27

El rey Roboam hizo en su lugar escudos de bronce y se los entregó a los jefes de la guardia de la entrada de la casa del rey.

1 Reyes 10:21

Todas las copas del rey Salomón eran de oro y toda la vajilla de la casa “Bosque del Líbano” era de oro macizo. No había nada de plata; no se hacía caso alguno de ésta en tiempos de Salomón,'

1 Reyes 9:14

Había mandado Hiram a Salomón ciento veinte talentos de oro.

1 Reyes 11:3

Tuvo setecientas mujeres de sangre real y trescientas concubinas, y las mujeres torcieron su corazón.

Eclesiastés 1:2

Vanidad de vanidades, dijo el Cohelet; vanidad de vanidades; todo es vanidad.'