Vivo con rectitud, y sigo los caminos de la justicia.
Me consuela, me guía por el camino correcto, por su nombre.
“Yo te instruiré, enseñándote el camino a seguir. Te advertiré, mirando por ti.
Así que tú sigue el camino del bien, y asegúrate de ir por los senderos de quienes hacen lo recto.
Entonces podrás reconocer lo que es recto y justo, y todo lo bueno , así como la forma en que debes vivir.
Recuérdalo en todo lo que hagas, y él te mostrará el camino correcto.
Ellas te guiarán cuando camines, te cuidarán al dormir, y te hablarán al levantarte.
El fruto que produzco es mejor que el oro, incluso que el oro puro, y mi cosecha es mejor que la plata más fina.
Yo otorgo riqueza a los que me aman, y lleno sus almacenes de tesoros.
La gente vendrá y dirá: “Subamos al monte del Señor, al Templo del Dios de Jacob. Allí Dios nos enseñará sus caminos y seguiremos sus indicaciones. Las enseñanzas de Dios se extenderán desde Sión, y su palabra desde Jerusalén”.
No tendrán hambre ni sed, y no se calentarán bajo el sol, porque el que los ama los conducirá a manantiales y los guiará hacia el agua.
Mira cómo lo hice testigo de los pueblos, líder y comandante para ellos.
El portero le abre la puerta y las ovejas responden a su voz. Él llama a sus ovejas por nombre, y las saca del redil.
Así que asegúrate de hacer lo que el Señor tu Dios te ha ordenado hacer, no te desvíes en ninguna dirección.
porque el Cordero que está en medio del trono será su pastor, y los guiará a fuentes de agua viva, y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos”.
