Déjalos que beban para que olviden su pobreza, y para que no recuerden más sus problemas.
Olvidarás tu miseria, recordándola sólo como agua bajo el puente.
y vino para hacerlos felices, aceite de oliva para hacer resplandecer sus rostros, y pan para hacerlos fuertes.
Dale alcohol a los que están muriendo, y vino a los que están sufriendo angustia.
Habla en favor de los que no tienen voz, y lucha por los derechos de los marginados de la sociedad.
No se emborrachen con vino, porque esto arruinará sus vidas, más bien llénense del Espíritu.