Si mientes, muestras odio por las víctimas de tus mentiras. Si halagas a las personas, causarás desastre.
Luego le contó su historia. Y esto fue lo que le dijo: “Ese esclavo hebreo que trajiste aquí trató de venir a deshonrarme.
También te guardará de la mujer que actúa con inmoralidad, de mujeres que tal como una prostituta tratan de seducirte con elogios.
Los que adulan a sus amigos ponen una trampa para hacerlos caer.
Te protegerá de una mujer malvada y de las palabras seductoras de una prostituta.
Ellas te protegerán de la mujer inmoral, y de la prostituta que viene a ti con palabras seductoras.
“Pero ustedes están tratando de matarme ahora, porque les dije la verdad que yo escuché de Dios. Abraham nunca habría hecho eso.