Presta atención a tu padre, y no rechaces a mu madre cuando sea vieja.
Hijo mío, presta atención a la instrucción de tu padre, y no rechaces la enseñanza de tu madre.
Un hijo sabio trae alegría a su padre; pero un hombre necio aborrece a su madre.
Hay quienes maldicen a sus padres y no bendicen a sus madres.
Los que ridiculizan a sus padres y desprecian la obediencia a la madre, los cuervos les sacarán los ojos y serán comidos por buitres jóvenes.
“Muestra respeto por tu madre y tu padre y guarda mis sábados. Yo soy el Señor tu Dios.
“Levántate y respeta a los ancianos. Muestra reverencia por tu Dios. Yo soy el Señor.
Moisés dijo: ‘Honra a tu padre y a tu madre;’ y también dijo: ‘Cualquiera que maldice a su padre o a su madre, debe morir’.
“¡Maldito sea el que deshonre a su padre o a su madre”. Todos dicen: “¡Amén!”